Durante la tarde del pasado jueves 9 de enero, se recibió un aviso por una persona que se encontraba en parada cardiorrespiratoria en la autovía A-67.
Una patrulla de la Guardia Civil que se encontraba en las proximidades, se desplazó a la mayor brevedad posible al lugar de la incidencia, observando cómo en el arcén derecho de la autovía había dos vehículos detenidos y tres personas en el exterior.
Los agentes se encontraron al bajar del vehículo a una persona realizando la maniobra RCP (reanimación cardiopulmonar) a un joven de 34 años que no respiraba.
Inmediatamente uno de los agentes prosigue con la maniobra RCP mientras que el otro agente da seguridad a la zona, desviando el trafico al carril izquierdo de la autovía.
Cinco minutos después, la persona empieza a recobrar el pulso y la respiración, poniéndolo el agente en la posición lateral de seguridad hasta la llegada de los servicios médicos, quienes llegaron instantes después.
Tras ser evaluado, el personal sanitario estabilizó a esta persona, viendo que resultaba necesario realizar una evacuación en helicóptero.
Para ello, los agentes de la Guardia Civil cortaron la circulación de la autovía, de forma que el helicóptero pudiera tomar tierra y trasladar al joven hasta el Hospital de Burgos.
Una vez que el helicóptero despegó, los agentes restablecieron la circulación en la autovía, retiraron el vehículo de la persona auxiliada hasta una localidad próxima y esperaron junto a la acompañante de este último hasta que unos amigos pudieron trasladarla a su domicilio.