Un año más, la Residencia tutelada por la Fundación Santa María la Real ha organizado una actividad intergeneracional para facilitar la integración social de los abuelos. Un grupo de 35 alumnos de 4º de Primaria del Colegio San Gregorio-La Compasión ha pasado unas horas con los abuelos sembrando plantas y conociendo el funcionamiento del invernadero.
Aprovechando la llegada del buen tiempo, la Residencia Tercera Actividad, gestionada por la Fundación Santa María la Real, ha organizado hoy una jornada de convivencia intergeneracional. Durante unas horas, 35 alumnos del Colegio San Gregorio-La Compasión de Aguilar de Campoo han compartido experiencias, risas e ilusión con los abuelos del centro asistencial.
La actividad consistía en la siembra conjunta de flores, que, una vez plantadas contribuirán a alegrar y animar el entorno de la Residencia. Además los niños han podido conocer de cerca el día a día de los abuelos y el funcionamiento del invernadero del centro.
Con este tipo de actividades de convivencia, la Residencia pretende contribuir al proceso de socialización de los abuelos, facilitando su relación con los jóvenes. “La llegada de niños al centro, bien sean nietos, familiares de trabajadores o, como hoy, alumnos de los colegios del entorno, es siempre motivo de entusiasmo para los residentes”, afirma Marimar Espartero, directora del centro asistencial.
“Quienes trabajamos día a día con los abuelos vemos como, por unos instantes, regresan a su infancia y se dedican a coleccionar tapas de yogur, cromos y todo aquello que está a su alcance para ofrecérselo, posteriormente, a sus jóvenes visitantes”, continúa. En esta ocasión, los abuelos han agasajado a los niños regalándoles unos llaveros que han estado realizando durante los últimos meses en el taller de manualidades.