Un año más, coincidiendo con la llegada del verano y el buen tiempo, desde la Residencia Tercera Actividad, gestionada por la Fundación Santa María la Real, se ha organizado una actividad intergeneracional de siembra de flores, en la que han participado alumnos de 4º de Educación Primaria del Colegio San Gregorio de Aguilar de Campoo.
Ayudados por sus tutores, por el personal de la Residencia y por algunos de los usuarios del centro, los alumnos del colegio San Gregorio dedicaron parte de la mañana de ayer a plantar flores en el jardín de la Residencia Tercera Actividad, ante la atenta mirada de buena parte de los residentes.
El objetivo de esta actividad, que lleva realizándose varios años en el centro gestionado por la Fundación Santa María la Real, es doble: por un lado, conseguir que los abuelos y los niños compartan unas horas y aprendan unos de otros ayudándose mutuamente y, por otro, abrir la Residencia Tercera Actividad al entorno de Aguilar de Campoo y, en este caso concreto, a la comunidad educativa.
Durante poco más de una hora, niños y abuelos sembraron flores, las regaron y visitaron el invernadero de la Residencia para conocer qué tipo de plantas y hortalizas se cultivan allí y qué cuidados requieren. Además, al término de la sesión, los abuelos obsequiaron a los jóvenes participantes con una planta de recuerdo, para que ellos mismos puedan cuidarla; así como una libreta y un molinillo de viento, realizados en los talleres de manualidades de la Residencia.
La actividad coincide también con la celebración, este mes de junio, del décimo tercer aniversario de la Residencia Tercera Actividad. Un tiempo en el que el centro ha apostado por convertirse en un “espacio abierto y diferente”, un lugar en el que a diario conviven una media de 75 abuelos y casi medio centenar de trabajadores.