La secretaria general del PSOE de Palencia, Miriam Andrés, ha mostrado su preocupación por los últimos datos conocidos sobre la situación sanitaria por la que atraviesa el Complejo Hospitalario de Palencia como consecuencia de la COVID-19.
A pesar de las obras en UCI se iniciaron en el pasado mes de junio para poder disponer de un total de 21 camas en lugar de las 16 con las que se contaba anteriormente, estos trabajos aún no han sido concluidos viéndose obligados a habilitar nuevos espacios de carácter provisional que están provocando graves trastornos entre los familiares de los afectados y en los propios profesionales.
En la actualidad la provincia de Palencia es la que presenta un mayor porcentaje de ocupación sobre las camas habilitadas para críticos de toda la Comunidad Autónoma, un total del 81 %. Los datos de la propia Junta reflejan que, de un total de 16 camas habilitadas en esta unidad, a día de hoy se encuentran ocupadas un total de 13. El cómputo global especifica que los pacientes de COVID hospitalizados en Palencia son 33 en planta y 4 en unidades de críticos.
Miriam Andrés ha reprochado que la Junta de Castilla y León haya abocado a la ciudad y a la provincia a padecer los efectos de tener un hospital de los años setenta, tras la absoluta incapacidad del PP en sacar adelante las obras del nuevo hospital.
La dirigente socialista recuerda que hace unos días la institución autonómica anunciaba la rescisión del contrato con la empresa encargada de ejecutar la obra, tres años después de haber sido adjudicada y tras numerosas certificaciones de cero euros. De hecho, el único avance experimentado en todo este tiempo ha sido la realización del nuevo parking.
Con el aumento de positivos por COVID en la provincia, los profesionales y familiares de los enfermos del hospital palentino se encuentran al límite y se temen que en los próximos días se llegue a situaciones aún peores.
La secretaria general del PSOE ha criticado, finalmente, los ritmos de los responsables de la Junta de Castilla y León que eternizan las obras que adjudican. El nuevo parking del hospital contó con un importante retraso en su finalización, el nuevo hospital sigue esperando la primera piedra desde hace más de una década y ahora la UCI sigue pendiente de la habilitación de cinco nuevas camas que no acaba de llegar.