Las fechas habituales de esta acción preventiva se adelantan por la pandemia, con el fin de evitar las complicaciones que, en pacientes pertenecientes a los grupos de riesgo sanitario, podría causar la coincidencia de la gripe y de la COVID-19
‘Una vacuna más, una gripe menos’ es el lema elegido para resaltar la importancia de la vacuna antigripal en la prevención de una enfermedad que es un relevante problema de salud tanto por su mortalidad y complicaciones como por sus costes sociales
La Administración sanitaria autonómica vacunará ya durante esta semana a personas mayores de 75 años institucionalizadas en centros de la Tercera Edad
La recomendación es que el acceso a la vacuna antigripal se realice de forma escalonada y siempre mediante cita previa
Castilla y León fue en 2019 la comunidad autónoma con mayor cobertura de vacunación entre las personas mayores de 65 años
La campaña autonómica 2020 de vacunación frente a la gripe comenzará, de forma generalizada en la Comunidad de Castilla y León, el próximo martes, 13 de octubre, si bien las primeras vacunaciones se desarrollarán a lo largo de la presente semana, específicamente en centros socio sanitarios y de atención a la Dependencia para los grupos de riesgo atendidos en esas instituciones, priorizando la población mayor de 75 años.
La Junta de Castilla y León anticipa las fechas habituales de esta acción preventiva de Salud Pública siguiendo así, en el actual contexto pandémico por la COVID-19, las recomendaciones al respecto adoptadas por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Este adelantamiento tiene como finalidad reducir el posible impacto gripal en plena pandemia por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, con la coincidencia temporal de ambas enfermedades respiratorias que, en pacientes en riesgo de complicaciones derivadas de la gripe, podrían ver comprometida su evolución clínica.
Por ello, la recomendación es vacunarse tanto ellos como las personas que les atiendan y de su entorno, además de los mayores de 60 años, los profesionales sanitarios y socio sanitarios y otros colectivos esenciales para la comunidad.
En este sentido, la indicación de años anteriores para vacunarse referida a los profesores de Educación Infantil y guarderías, se amplía en esta ocasión a cualquier docente o personal de centros educativos de Castilla y León.
Con el lema elegido este año, ‘Una vacuna más, una gripe menos’, la Consejería de Sanidad quiere reforzar el convencimiento social de que la vacunación antigripal no sólo es una vía de protección individual, sino que se confirma año tras año como elemento fundamental para el cuidado de la salud colectiva, más aún en la situación pandémica actual con la coexistencia de ambas patologías respiratorias.
Por ello, la recomendación es clara: la vacunación te protege a ti, a los tuyos y nos protege a todos, compromiso y solidaridad que es aún más relevante en aquellos colectivos y profesionales que, por cuidados familiares o por su trabajo, están en contacto con los colectivos más vulnerables sanitariamente.
La vacunación frente a la gripe es voluntaria y gratuita para las personas que así lo tienen recomendado por ser mayores de 60 años, por su pertenencia a grupos de riesgo sanitario o social y formar parte de otros grupos de interés para la Comunidad.
La campaña autonómica 2020 de vacunación frente a la gripe presenta, como novedades, además de la ya indicado sobre la recomendación de inmunización a todos los trabajadores de centros educativos, la vacunación de mujeres durante el puerperio, que no habían recibido la vacuna en el embarazo y la recomendación a personas con hipertensión arterial aislada.
Escalonada, con cita previa y colectivos a vacunar
La recomendación, a la hora de acceder a la vacuna frente a la gripe, es, como en años anteriores, hacerlo de forma escalonada y siempre mediante cita previa en el correspondiente centro de salud, consultorio local o punto de vacunación habitual.
Esa cita previa estará disponible vía telefónica, llamando al centro de salud correspondiente y también a través de la app ‘Sacyl Conecta’ y en la página web de Salud Castilla y León.
Los profesionales de Atención Primaria tendrán un recordatorio, vía historia clínica, referido al consejo de vacunar a aquellos pacientes que así lo tengan indicado e, incluso, la estrategia de captación prevista indicará la posibilidad de que se realice, especialmente entre la población más mayor y/o vulnerable, una labor de captación proactiva.
Asimismo, para aumentar la captación de pacientes susceptibles de ser vacunados frente a la gripe, la propia receta electrónica incluirá la indicación de vacuna antigripal.
En este ámbito de la dispensación farmacéutica, la Consejería de Sanidad cuenta con la colaboración del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos de Castilla y León y de sus profesionales, quienes en las oficinas de Farmacia prestarán información individualizada sobre la conveniencia de vacunarse.
La Junta comenzará a vacunar esta semana a población de especial riesgo institucionalizada en centros de la Tercera Edad y a partir de la semana que viene se abre el plazo para la vacunación con carácter general.
En el caso de centros de atención a personas mayores y de asistidos serán los profesionales de Atención Primaria, en colaboración con el personal de esas instituciones, los que se encarguen directamente de la vacunación; asimismo, los pacientes hospitalizados podrán recibir durante su estancia en el hospital la vacuna frente a la gripe, en función de su situación clínica
Para la presente campaña y aun habiéndose adelantado las fechas, no se ha previsto fecha límite, manteniéndose el acceso a la vacuna antigripal hasta que las condiciones epidemiológicas así lo determinen.
La vacunación antigripal es primordial para los enfermos crónicos, más aún en el actual contexto sanitario, por cuanto les protege de los posibles agravamientos y complicaciones que, en sus patologías de base pueda causar la gripe, por lo que es fundamental que se inmunicen ante la enfermedad.
Los grupos de riesgo sanitario que tienen recomendada la vacuna antigripal son los mayores de 60 años; las personas adultas y los niños mayores de seis meses que padezcan enfermedades crónicas -pulmonares, cardíacas, renales, hepáticas, oncológicas, neuromusculares graves, diabéticos, hipertensos, inmunodeprimidos, hemofilia y trastornos hemorrágicos crónicos, receptores de hemoderivados y transfusiones múltiples, fístula de líquido cefalorraquídeo, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria crónica, etc.-; personas con discapacidad y/o déficit cognitivo -síndrome de Down, demencias, etc.-; pacientes crónicos de cualquier edad institucionalizados; niños y adolescentes, de entre seis meses y dieciocho años, que reciban tratamientos prolongados con ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar el síndrome de Reye tras la gripe; personas con obesidad mórbida -índice de masa corporal superior a 40-; niños entre los seis meses y los dos años de edad, con antecedentes de prematuridad menor de 32 semanas; y gestantes, en cualquier momento del embarazo y mujeres durante el puerperio, si no se han vacunado durante el embarazo.
La vacunación se estima necesaria también para residentes de cualquier edad en instituciones -geriátricos y de asistencia a enfermos crónicos, disminuidos psíquicos, etc.-; trabajadores de centros sanitarios; personas que puedan transmitir la gripe a pacientes de riesgo: trabajadores de centros asistenciales de mayores, trabajadores sociales de similar dedicación -atención a crónicos-; cuidadores y convivientes con personas de riesgo; estudiantes en prácticas en centros sanitarios; servicios esenciales para la Comunidad: bomberos, cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, Protección Civil, etc.); trabajadores de granjas y mataderos de aves y otros relacionados con el medio ambiente; y personal de centros educativos en cualquier nivel de enseñanza.
Es realmente importante insistir en la transcendencia de la vacunación de los profesionales sanitarios y socio sanitarios, no sólo como medio para su autoprotección y la de su entorno más cercano, sino también como compromiso social y medida preventiva para evitar la transmisión del virus a los pacientes a los que atienden y a los que la enfermedad podría agravar sus patologías previas.
Asimismo, la Junta desarrollará una campaña de vacunación específica dirigida a los empleados de la Administración autonómica.
Casi un millón de vacunas este año y coberturas de 2019
La Junta de Castilla y León podrá disponer para la campaña autonómica 2020 de vacunación frente a la gripe de hasta 978.750 vacunas, entre las 620.000 adquiridas por el Gobierno castellano y leonés y las 358.750 que podrían llegar a ser distribuidas por el Ministerio de Sanidad, en caso de ser necesarias, para reforzar esta acción preventiva de Salud Pública en el conjunto del Sistema Nacional de Salud.
La Consejería de Sanidad destina 3.124,160 euros a la adquisición de las vacunas aportadas por la Administración autonómica, cantidad que se divide entre los 1.878.240 euros correspondientes a la vacuna antigripal de inmunogenicidad reforzada y 1.245.920 euros de las dosis tetravalentes.
Los tipos de vacuna a utilizar son la vacuna tetravalente con alta carga antigénica, destinada a residentes institucionalizados, con prioridad para las personas de 75 o más años y con la que se vacuna a este colectivo en centros y residencias socio sanitarias; la vacuna tetravalente, recomendada para personas de hasta 64 años; y la vacuna trivalente adyuvada, dirigida mayoritariamente a la población a partir de los 65 años.
En cuanto a la distribución inicial por provincias de las vacunas frente a la gripe a lo largo del mes de octubre, ésta queda de la siguiente forma: Ávila, 46.230 dosis; Burgos, 85.190; León, 114.790; Palencia, 42.780 Salamanca, 89.065; Segovia, 46.040; Soria, 33.100; Valladolid, 126.340; y Zamora, 58.340.
En total, 641.875 vacunas iniciales, a las que se podrán sumar, de forma escalonada y a partir de noviembre, más dosis según sea necesario, hasta esas 978.750 vacunas equivalentes al 40% de la población castellana y leonesa
En la anterior campaña, en 2019, 543.580 castellanos y leoneses accedieron a la vacuna frente a la gripe, el 22,65% de la población.
Este dato autonómico, desglosado por grupos de edad, presenta las siguientes cifras: en población de entre 60 y 64 años inclusive, 45.135 personas -el 26,89%-; entre 65 y 69 años, 61.514 vacunados -el 42,88%-; entre 70 y 74 años inclusive, 73.438 -el 56%-y en persona de 75 años y mayores, 236.707 -un 70,88%-.
En cuanto a residentes en centros de personas mayores, el número de vacunados el año pasado fue de 38.189 o, lo que es lo mismo, el 90,29% de los institucionalizados; por su parte, 5.431 mujeres embarazadas se vacunaron, situando la cobertura vacunal en este grupo de riesgo en el 51,97%.
El balance provisional de la campaña de 2019 sitúa a Castilla y León como la comunidad autónoma española con un mayor porcentaje de personas vacunadas mayores de 65 años, un 61,07 %
Los profesionales sanitarios de la Gerencia Regional de Salud, en Atención Primaria, que se vacunaron fueron 3.427 -un 40,35 %-, mientras que, por su parte, en el ámbito de la Especializada de Sacyl, el número que se alcanzó fue de 9.660 -el 36,98 %-; por su parte, 202 trabajadores de la Gerencia de Emergencias Sanitarias recibieron la vacuna, lo que supone un 61,13 %.
En total, 13.289 profesionales inmunizados o, lo que es lo mismo, el 38,04 % de la plantilla pública sanitaria de la Comunidad
En el ámbito socio sanitario, 5.193 trabajadores de centros de atención a personas mayores se inmunizaron, lo que supone el 28.89 % y por último, los servicios de prevención de riesgos laborales y mutuas de la Comunidad facilitaron el acceso a la vacunación a 9.431 trabajadores.