Por fin pudo jugar el Velilla en la Serna. Lo hizo un dos meses después de su último partido como local el 22 de diciembre en la victoria frente al Juventud del Círculo. Los de David Pérez estaban acusando la falta de ritmo y la imposibilidad de entrenar en condiciones óptimas. Sin partidos en La Serna, donde no han perdido esta temporada, las posibilidades de ascenso comenzaban a diluirse. A pesar de todo, la climatología respetó a los azulones y por fin volvieron a jugar como locales ante el colista de la categoría, el Castilla Palencia, que agoniza en su regreso a la Provincial de Aficionados. En un campo que se ha recuperado durante los últimos días, pero muy pesado y embarrado para el juego de toque norteño, a pesar de todo y pese a las dificultades, los de Velilla optaron por ser prácticos para derrotar a los de la capital. Victoria trabajada y sufrida del equipo local ante un Castilla Palencia que jugó en superioridad numérica toda la segunda mitad, tras haber fallado un penalti, y que no fue capaz de hacer valer su gol al inicio del segundo tiempo.
La primera parte, muy disputada, contó con ocasiones por uno y otro bando. Por los capitalinos, Sergio Obeso y Mateo crearon peligro en los primeros minutos. Contestaron los velillenses con acciones de Chuco y Chema, en el último caso con una soberbia parada del portero visitante. El Velilla dominaba pero no acababa de rematar, y en una de estas continuas idas y venidas llegaría una circunstancia que cambiaría el devenir del partido. Los locales se quedarían con un jugador menos tras señalar el arbitro penalti y expulsión. Mal panorama para los locales, aunque Chema le detuvo la pena máxima a Mateo.
En la reanudación Piki adelantaba con un derechazo al Castilla. Pero en tres acciones norteñas en los minutos 55’, 65’ y 75’ cambiaría de forma radical el partido. A pesar de contar con un jugador menos, el Velilla se rehízo ante la adversidad y los demostró con creces. Dos cabezazos del central Luismi (a centros de Chema y Chuco) y un remate de Marco a pase de Chema), le dieron la vuelta al marcador. Chema dejó aparcada el sábado su faceta goleadora, pero demostró que cuenta con muchas más virtudes como las de asistente. Con 3-1 en el marcador, a cinco minutos de la conclusión Artzeiz aprovechaba un fallo de Peri en el despeje para poner el 3-2. Pero ese marcador sería inamovible y el Castilla terminó otro partido con buen juego tapado por sus errores. Y el Velilla, con dos partidos aplazados que jugará en Semana Santa aún sigue soñando.
Opciones de ascenso
Esta victoria deja al equipo velillense en la octava plaza con 35 puntos tras dos victorias consecutivas, pero alejados del segundo puesto que daría plaza en Tercera División. Actualmente el Burgos Promesas cuenta con 45 puntos, con nueve de margen sobre los norteños, aunque los de David Pérez podrían situarse a tres puntos de los burgaleses si logran la victoria en los dos partidos que tienen aplazados en La Serna, donde no han perdido esta campaña. Además, hay que tener en cuenta que los del Promesas deberán visitar el feudo norteño, por lo que si todas las conjeturas se cumplen podrían optar al ascenso. Además, todos los equipos de la parte alta salvo el Becerril deberán viajar al norte de la provincia, por lo que la empresa no se antoja tan complicada.
El próximo partido de los azulones será dentro de la provincia con la visita al campo del Becerril, que se encuentra en la parte alta y con serias opciones de ascender. Pocos equipos han logrado sacar puntos del Mariano Haro. Los de Tierra de Campos cuentan con 42 puntos a tan sólo tres del descenso, pero al igual que el Velilla aún tiene dos partidos aplazados por disputar, lo que le puede catapultar a Tercera División. Los de Becerril llegarán a este partido con una jornada de descanso forzado tras la suspensión de su partido frente al Villamuriel. Por su parte, los velillenses lo harán tras dos victorias consecutivas y con la necesidad de continuar sumando victorias para no descolgarse del grupo cabecero que lucha por el ascenso de categoría.