La Diputación de Palencia ha adjudicado a la empresa SV60 Arquitectos, SLU, el contrato para la redacción y dirección de obra del proyecto rehabilitación del refugio del Golobar, en Brañosera, para su conversión en albergue turístico de dos estrellas de montaña. El presupuesto de adjudicación asciende a 96.800 euros, 9.608 euros menos que el presupuesto base de licitación que se fijó en 106.408 euros, IVA incluido.
El documento incluirá, según recoge la memoria justificativa, tanto la rehabilitación del edificio existente como la propuesta de interiorismo y el equipamiento necesario para su funcionamiento.
La adjudicación de este contrato supone un importante paso para hacer realidad un proyecto que busca dar vida a una infraestructura que está en desuso y que, por lo tanto, su reforma y puesta en funcionamiento beneficiará notablemente a la economía local y al desarrollo turístico del municipio y de toda la provincia.
Una vez publicada la adjudicación, se establece un plazo máximo de 15 días para la formalización mediante firma del contrato y, a continuación, el inicio de los trabajos por parte de SV60 Arquitectos que dispondrá de un plazo de 15 meses para elaborar la redacción y dirección de obra del proyecto del Golobar.
Han sido cuatro las empresas licitadoras, de las una fue excluida del proceso, resultando adjudicataria SV60 Arquitectos, SLU, por haber presentado la mejor relación calidad-precios.
Este proyecto está enmarcado en el Plan de Sostenibilidad Turística de la Montaña Palentina, y está integrado por los municipios que forman la Carta Europea de Turismo Sostenible de la Montaña Palentina que define el plan de acción de dicha estrategia. Además, forma parte de del Plan de Acción de la Agenda Rural de Palencia (ARP).
El contrato adjudicado está financiado con fondos europeos NextGeneration, a través del Programa Extraordinario de Sostenibilidad Turística en Destinos 2021-2023, con una aportación de dichos fondos del 82,65 por ciento.
SITUACIÓN ACTUAL. El edificio actual es el resultado de un proyecto presentado en 1977 que no llegó a su completa realización. Está en estado de abandono y en situación de acceso descontrolado. Los procesos ruinógenos sobre los elementos existentes han evolucionado debido a su paralización a lo largo del tiempo habiendo llegado a nuestros tiempos la estructura principal del edificio, la hoja exterior de cerramiento de ladrillo y la cubierta.
Por ello, la recuperación de El Golobar, supone el culmen y el paso de una idea que estaba inacabada a un nuevo modo de vida y forma de entender la relación entre naturaleza y turismo, lo que conlleva la posibilidad de controlar y regular los usos y actividades que se desarrollan en la montaña en cualquiera de las estaciones del año.
Con este proyecto se busca crear un edificio versátil dotado de servicios y herramientas que así lo hagan posible en uno de los lugares por excelencia de la provincia de Palencia, el corazón de la Montaña Palentina. La nueva instalación turística dará cobertura a opciones de turismo muy variada, como senderismo, cicloturismo, alpinismo o incluso esquí.
Asimismo, se conseguirá que este recurso atraiga y fije población, que cree nuevos puestos de trabajo y que se fomente el turismo consiguiendo una mejora y evolución de la economía local.
A nivel de organización espacial, se recupera un espacio pensado para el hospedaje de todas aquellas personas que desean conectar con el espacio natural, tanto para el descanso en el sentido más literal, como para el desarrollo de cualquier tipo de actividad relacionada con el ocio y el tiempo libre.
DISTRIBUCCIÓN DEL EDIFICIO. Para el edificio, que consta de dos plantas se ha abordado la siguiente distribución. En primer lugar, la planta baja se ha planteado como la zona donde se encuentren todas las estancias de uso común necesarias como comedor, cafetería-restaurante, en el lado este, mientras destinamos el lado oeste para alojar la zona del gimnasio y de servicio a bicicletas, aseos y vestuarios.
Por lo tanto, la planta primera será donde se estima que se desarrollen todas las estancias habitacionales con baño individual para cada dormitorio, buscando así un nivel elevado de prestaciones. El módulo se puede configurar como una suite con cama de matrimonio, habitación doble o triple con cama sencilla, o en la misma organización, con litera, de forma que obtenemos 10 módulos que admiten desde 2 hasta 6 plazas, lo cual permite una capacidad de alojamientos en un rango entre 20 y 60 huéspedes.