Las faenas y los juegos de antes, las costumbres, el origen del fuego, la alimentación, las viviendas antiguas, la vestimenta y el tiempo libre, eran grandes desconocidos hasta hace unos días para los jóvenes de la Montaña Palentina. Sin embargo, en las últimas semanas, los alumnos de 5ºA de Primaria del Colegio Público Castilla y León se han convertido en alumnos aventajados en esta materia gracias a unas jornadas de convivencia que han compartido con los chicos y las chicas del colegio Pradera del Aguilera de Villamuriel en el Centro Rural de Innovación Educativa (CRIE) de Cervera de Pisuerga.
«El tema central de esta semana ha sido el acercamiento al concepto de ‘Recuperación de Saberes’, volver a ‘lo de antes’ desde un punto de vista funcional y práctico», explica Cristina Rozas, directora del Centro aguilarense. Por eso, durante su estancia en la villa cerverana, los alumnos y las alumnas han realizado infinidad de actividades físicas al aire libre como las de orientación natural, práctica con zancos, construcción de chozos o juegos tradicionales. Tampoco han faltado las salidas por el entorno, las cenas tradicionales, las historias al calor de la lumbre, la visita al abrevadero y al lavadero de Peñas Negras, un taller de cerámica, un taller de plástica para aprender a construir con sus propias manos, un taller de música como elemento de transmisión de cultura, otro de alfarería, otro de elaboración de telares y otro de elaboración de ungüentos con plantas.
«Los niños y niñas también se han desplazado hasta el municipio ecológico de Amayuelas de Abajo para conocer, de primera mano, la transformación y conservación de alimentos (cuajada, queso fresco, mermelada, etc), el huerto, el semillero, el secadero, el palomar y la bodega», continúa la directora del CEIP Castilla y León, que también apunta que «aunque para muchos ésta ha sido la primera ocasión en la que han pasado varios días fuera de casa y las noches se hicieron algo duras, todos los alumnos participantes guardan de esta experiencia gratos recuerdos y grandes momentos que perdurarán en su memoria». Además, para hacer partícipes a sus padres y resto de compañeros, los niños han trabajado en la elaboración de un diario en el que han narrado, con todo lujo de detalles, su día a día en Cervera.
En su experiencia, los jóvenes estuvieron acompañados en todo momento por profesores del centro. «Yo tampoco quise perderme esta interesante propuesta puesto que contar con este tipo de instalaciones en la provincia es todo un lujo que no se debería perder. Además, las actividades que se realizan en ellas facilitan la educación integral potenciando actividades que favorecen la sociabilidad y la convivencia, y apuestan por la innovación educativa desde su vertiente metodológica y tecnológica. Es un lugar donde los niños pueden desarrollar sus habilidades y un complemento ideal para las lecciones que se imparten diariamente en el aula», afirma Cristina Rozas.
Finalmente, cabe destacar que la próxima semana serán los alumnos de 5ºB los que, junto a los estudiantes de Osorno y de Torquemada, disfruten de esta experiencia en el CRIE de Cervera.
SOBRE EL CRIE. El CRIE es un centro ubicado en plena Montaña Palentina donde los usuarios pueden disfrutar de la proximidad de un entorno natural, etnográfico e histórico que ofrece innumerables posibilidades para una acción didáctica de calidad, aprovechando la oportunidad pedagógica que el propio medio encierra. La función del CRIE es innovar, completar y compensar ampliando la acción educativa que se realiza en los centros de su ámbito de actuación, colaborando en optimizar el desarrollo curricular. Así, algunos de los objetivos que se persiguen son potenciar y favorecer el desarrollo personal de los alumnos, especialmente en lo referido a sus capacidades de socialización; programar y realizar, conjuntamente con el profesorado de los centros participantes, actividades de desarrollo curricular que complementen y refuercen los respectivos currículos escolares así como favorecer el conocimiento y el disfrute, mediante la experiencia del contacto, con un medio natural y cultural rico y privilegiado como es la Montaña Palentina, entre muchos otros objetivos.