Esta semana, seis personas, cinco mujeres y un hombre, han comenzado su formación dentro del programa mixto de atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales, financiado por la Junta de Castilla y León.
La acción formativa se imparte en las instalaciones de Tercera Actividad, el centro de atención a personas mayores y/o dependientes que la Fundación Santa Maria la Real gestiona en Aguilar de Campoo.
Las seis plazas que se ofertaban en esta ocasión se han completado y, desde el primer día, los participantes disponen de un contrato de formación a jornada completa con cotización en la Seguridad Social. Además, recibirán un salario mensual correspondiente al 100% del importe del salario mínimo interprofesional.
“Muchas de las personas que han participado en ediciones anteriores del programa han logrado ya un empleo”, señala Alejandro Serrano, director de Tercera Actividad Aguilar. “Más del 70% de las personas que formaron parte de las últimas ediciones están actualmente empleadas en residencias o brindando asistencia a domicilio. Además, en Tercera Actividad, un 50% de nuestro personal está compuesto por trabajadoras que se formaron a través de este ciclo oficial”, destaca.
Formación teórico-práctica
El programa abarca un completo plan de 900 horas que combina la teoría con la práctica. ¿Cuál es su contenido exacto? Cuatro módulos educativos: dos enfocados en aspectos psicosociales y de gestión, y otros dos centrados en higiene alimentaria y cuidados sanitarios. “Esto permite a los participantes aprender a proporcionar el cuidado más apropiado a las personas dependientes, al margen de su edad o grado de dependencia”, concreta el director de Tercera Actividad.
De esta manera, se adquieren habilidades para asistir a personas mayores o dependientes en diversas actividades diarias, como movilización, higiene y alimentación. También se capacita para mejorar la comunicación, brindar apoyo emocional, fomentar el ánimo y proporcionar compañía. “Lo más valorado de la formación es la oportunidad de aplicar desde el inicio los conocimientos adquiridos y las múltiples perspectivas profesionales que este certificado ofrece”, apunta Serrano.
Múltiples salidas profesionales
De hecho, el certificado que les acredita como profesionales de la atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales les da acceso no solo a instituciones, ya sean residencias, centros de día u otras, sino también a desempeñar tareas de cuidado cualificado en el hogar. Un sector en el que existe una gran demanda de empleo, especialmente para gerocultores capaces de ofrecer una atención personalizada, cercana y profesional.