El pasado miércoles se desarrollaba un acto de reconocimiento a todas las personas y colectivos que han trabajado durante la crisis sanitaria, y en las inundaciones de diciembre.
Pese a que no se celebran las Fiestas del Carmen, debido a las restricciones sanitarias, el Ayuntamiento de Barruelo de Santullán ha homenajeado a distintos colectivos. La Plaza de España fue el escenario de este sencillo acto, donde el alcalde, acompañado de las Damas y Caballeros, que permanecerán un año más en el cargo, y de la concejala de Fiestas, entregaron un detalle a los siguientes colectivos: Guardia Civil, sanitarios, voluntarios, Asamblea Local de Cruz Roja, docentes, y trabajadores del Ayuntamiento de Barruelo de Santullán.
Asimismo, y pese a que no se celebran festejos patronales, Cristian Delgado cedió la vara de mando, como Regidor Síndico a Don José María Polanco del Barrio, por su inestimable labor. Posteriormente se impusieron los pañuelos a los nacidos en el último año, y se disfrutó de la música de Piri Piri Folk.
El discurso del alcalde fue el siguiente:
“Compañeros de corporación, damas y caballeros, visitantes, vecinos, vecinas, muy buenas tardes a todos.
Hoy os hemos convocado en nuestra querida Plaza de España, para reconocer la labor conjunta, que hemos desarrollado en este último año. Es un día raro, duro, triste, pero a la vez de satisfacción por el trabajo bien hecho. Hoy, deberíamos estar dando el pistoletazo de salida a las Fiestas del Carmen 2020, pero como bien dice la portada del libro, ¡Nos vemos el año que viene!
Mirad, ha sido un año duro, cargado de problemas, retos, inconvenientes, pero sobre todo marcado por una solidaridad tremenda, un apoyo constante, un trabajo incansable, y todo por vosotros, y gracias a vosotros. Hace escasamente un año, me subía al escenario de la Casa del Pueblo, recién elegido, con una ilusión y ganas tremendos.
Nunca pensé un año después, que íbamos a vivir todo lo que nos ha tocado. A la labor diaria del Ayuntamiento, a los retos, a los problemas, y a las trabas, se han sumado
cuestiones impensables. En el mes de diciembre, las lluvias torrenciales nos pusieron a prueba. La noche del 19 al 20 de diciembre, no se me olvidará jamás, y no porque el 20 fuera mi cumpleaños, sino porque ese día tomé conciencia del gran paso que había dado al querer representaros, pero también la carga que conlleva.
Esa noche, la inundación de la Residencia, el desalojo, el agua hasta el cuello, las calles reventadas, los lloros, la impotencia, se quedaron pequeñas frente a las ganas, la solidaridad, la vecindad, el apoyo mutuo y, sobre todo, el trabajo conjunto. Esa noche, yo dictaba las órdenes, pero simplemente hacía lo que vosotros ya estabais haciendo, AYUDAR A VUESTRO PUEBLO, POR EL BIEN DE TODOS, Y POR NUESTRA PROPIA SUBSISTENCIA.
Ese día, y los días posteriores, Barruelo de Santullán estuvo a la altura, unidos, trabajando conjuntamente, y siendo un ejemplo para el resto de administraciones de poblaciones y del mundo entero. Tengo recuerdos, como fogonazos, que me vienen a la cabeza, los vecinos bajando a nuestros residentes, por una escalera de obra, como podíamos, las calles anegadas y reventando muros para poder desaguar, la entrega de mantas, la solidaridad, las manos en mi hombro, las palabras de no flaquees, estamos contigo, y estas al frente.
Vuestra labor ha sido reconocida por todos, y ahora aún reclamo la ayuda que se nos debe, porque de momento, estamos haciendo frente, solos, a todas y cada una de las reparaciones, ocasionadas, con la cabeza bien alta, pero reclamando lo que nos corresponde. Quiero acordarme hoy especialmente de nuestros residentes, a los que garantizaremos su vuelta, en las condiciones que se merecen, y con plenas garantías. Y en especial quiero acordarme de Horacio, un valiente, que nos dejó unas semanas después, pero que esa noche aguantó como un jabato.
Y llegó Navidad, y se inició un 2020 cargado de proyectos, de retos, pero sobre todo de ilusiones. Pero no contábamos con lo que nos venía. El 14 de marzo, se decretó el Estado de Alarma, frente a una amenaza invisible, irreconocible, pero letal. Desde ese mismo día, incluso antes, habéis trabajado para que estuviéramos protegidos, para atender a los que nos necesitaban, pero sobre todo, demostrando una vez más, que existen muchas más cosas que nos unen, que las que nos separan.
Y es aquí donde voy a comenzar con los reconocimientos, a todas aquellas personas y colectivos, que creo, han dado todo y más, para que Barruelo, y todas sus Juntas Vecinales, hayan afrontado esta pandemia en mejores condiciones. Somos una población vulnerable, envejecida, pero fuerte y solidaria, por lo que Juntos Somos Imparables.
El primer reconocimiento de la tarde, se lo quiero hacer a los que son mis compañeros, porque más allá de que sea su Jefe, desde que tomé posesión del cargo he comprobado una cosa: son
leales a Barruelo, están sin que se lo pidas, y durante todos estos meses se han adaptado a los cambios que se les ha aplicado en su jornada, funciones, y demás.
Por todo ello, el primer agradecimiento, para los que pido un fuerte aplauso, es para los TRABAJADORES DEL AYUNTAMIENTO DE BARRUELO DE SANTULLÁN.
Seguimos, con los agradecimientos. Les hemos aplaudido, hemos sido su aliento, cuando no les quedaba, les hemos dotado de material, ropa, mascarillas, y todo lo que ha hecho falta. Hemos detectado fallos sí, pero creo que todos debemos enmendarlos.
Por todo ello, pido un fuerte aplauso, para los sanitarios, hoy aquí representados por el Coordinador de la Zona Básica de Salud de Aguilar de Campoo, Carlos Presencio.
He hablado con ellos, mañana, tarde y noche, nos hemos reunido casi a diario, durante todo el Estado de Alarma, y gracias a ellos, también pudimos evacuar a los Residentes de Santa Bárbara. Han estado, están y estarán.
Por todo ello, pido un fuerte aplauso para el cuerpo de la Guardia Civil, hoy aquí representados por el Sargento.
Seguimos con los reconocimientos. En este caso, también hemos mantenido comunicación constante, les hemos dotado de material, apoyo, y logística, y ellos han correspondido al pueblo con creces. Apoyo a los enfermos, llevar recetas, comida, entre otras muchas cuestiones.
Por todo ello, hoy aquí, pido un fuerte aplauso para los voluntarios de Cruz Roja, hoy aquí representados por su presidente, Javier Avelino Calderón.
Seguimos con más reconocimientos, en este caso a los jóvenes de este pueblo. El grupo de voluntarios más activo ha sacado pañales de la residencia, ha limpiado contenedores, zonas comunes, han repartido mascarillas, han hecho de todo, cuando se les ha pedido. Hoy quiero reconocer, muy especialmente, a los voluntarios, a los que tenemos mucho que agradeceros.
Un fuerte aplauso para ellos.
Hemos hablado constantemente, se han adaptado a las circunstancias, y les hemos ayudado, en la medida de nuestras posibilidades.
Por todo ello pido un fuerte aplauso para los docentes del CEIP Nuestra Señora del Carmen.
Y hasta aquí irían los reconocimientos. Pero quiero hacer un último. Pese a que no tenemos fiestas, pese a que no hay pregón, pese a que no tendremos verbenas, y pese a lo triste que se nos va a quedar esta semana, sí que desde el equipo de gobierno hemos querido nombrar un regidor síndido.
Se trata de una figura, creada al inicio de esta legislatura, y que es un cargo simbólico, un alcalde o alcaldesa durante el periodo festivo, o NO FESTIVO, como es el caso.
El año pasado fue Yolanda Alonso, en nombre de la Plataforma Valle de Santullán, quien tenía el honor de representaros, durante los festejos. Ahora, y pese a que no hay festejos, sí que vamos a reconocer la labor de una persona.
En este caso diré que es una persona del pueblo, para el pueblo, que quiere a su pueblo, y sobre todo, que es el fiel reflejo del carácter de los barruelanos y barruelanas: afable, trabajador, familiar, amigo de sus amigos, pero sobre todo, una buena persona.
Esta persona en cuestión, no tiene ni idea de que va a ser nombrado como Regidor Síndico 2020, pero sin duda, se lo merece. Siempre tiene disponibilidad, una palabra de apoyo, colabora, aporta, en definitiva, una persona de esas que suman, a las que no hay que perder, y a las que hay que reconocer su labor, siempre que se pueda.
Este año, ha sido especialmente duro, pero no por ello ha dejado de aportar. He tenido la oportunidad de compartir con él buenos y malos momentos, durante estos meses, y pese a que no teníamos mucho trato personal, he conocido a una bella persona, a un gran barruelano, y a un excelente compañero.
Por todo ello, por la total unanimidad del equipo de gobierno, y en nombre de los poderes que se me concedieron en la sesión plenaria del 15 de junio de 2019, procedo a nombrar, y le pido que suba a este balcón, REGIDOR SÍNDICO 2020, A:
Don José María Polanco del Barrio, nuestro alcalde pedáneo.
Y ahora vamos a proceder a otro acto, que si bien se instauró por parte de las peñas, institucionalizó el Ayuntamiento, el pasado 2019. Vamos a dar la bienvenida a los pequeños nacidos en este 2020, y a los que no estén les guardaremos el pañuelo, y a los que falten se lo haremos.
Una vez finalizado el acto, y antes de dar paso a la música de Piri Piri Folk, solo quiero agradeceros el buen comportamiento, el apoyo recibido, pediros perdón si no hacemos las cosas tan rápido como se merecen (pero los recursos y medios son los que son), y sobre todo, quiero manifestaros, que podéis ir con la cabeza bien alta, con el orgullo barruelano por bandera, puesto que ya nadie nos mira por encima del hombro, y si lo hace, no se lo permitáis.
Nosotros mientras tanto, seguimos trabajando para sanear, poner en orden, liquidar deudas, y sobre todo, sentar las bases de un futuro que será prometedor.
Un último aviso. Hemos cancelado estas fiestas, no por gusto, sino por una imposición autoimpuesta, por el bienestar de todos. No queremos tener que suspender ninguna más, no
queremos tener que encerrarnos de nuevo en casa, no queremos dejar de abrazarnos, ni de vernos, ni de tocarnos, pero para que esto ocurra, debemos ser responsables. Debemos usar mascarillas, debemos protegernos, guardar las distancias y seguir las recomendaciones. De nada sirve un verano sin esto, que conllevaría meses de encierro, muertes, y lamentos, como hemos tenido todo este tiempo.
Pido, antes de finalizar, un minuto de silencio, por los que nos han dejado, ya no solo por el COVID-19, sino por otras causas.
Y ya para finalizar, pido que gritéis conmigo.
¡Viva Nuestra Señora del Carmen!
¡Viva Barruelo de Santullán!”