La Diputación de Palencia mantiene desde 2016 un acuerdo de colaboración con la Junta de Castilla y León para gestionar y cofinanciar el llamado Plan de Empleo Forestal Local, que durante el segundo semestre del pasado año efectuó cerca de medio millar de actuaciones, encaminadas fundamentalmente a la prevención de incendios forestales, en casi la mitad de los pueblos de la provincia.
En efecto, hasta 218 localidades palentinas, pertenecientes a 133 municipios del medio rural se beneficiaron en 2019 de la visita de las cuadrillas del Plan de Empleo Forestal Local, cuyo presupuesto anual ronda los 450.000 euros, sufragados en su mayoría por el Servicio Público de Empleo de la administración regional (300.000 euros). La Diputación aporta 160.000 euros para dotar de maquinaria y materiales a los equipos y para gestionar el programa, que se viene desarrollando desde 2016 en el marco de los acuerdos de la Junta con los agentes sociales (Diálogo Social) y con las entidades locales (Plan de Empleo Local).
GRAN ACOGIDA EN EL MEDIO RURAL. El Plan de Empleo Forestal Local prácticamente ha elevado el 75% su actividad en la provincia de Palencia desde aquel año de su creación. Si en 2016 se atendieron 163 localidades de apenas un centenar de municipios, en este último año se han alcanzado 218 localidades de 133 municipios, que son prácticamente el 70% del total en los que se divide la provincia, lo que revela la excelente acogida de este programa entre las entidades locales del medio rural.
No en vano, la mayoría de las acciones que desarrollan las cuadrillas son solicitadas por los ayuntamientos (más de trescientas peticiones) y juntas vecinales (sesenta y dos peticiones). Tres de cada cuatro intervenciones en 2019 procedían de labores sugeridas por los entes locales palentinos, si bien la Junta y la Diputación también programan acciones para este plan, en el que trabajaron treinta y dos personas desde mediados de junio hasta mediados de diciembre, coordinadas por un ingeniero técnico forestal y un capataz-encargado.
Hasta el pasado año, seis cuadrillas componían la plantilla, con las que se abarcaba todo el territorio provincial desde sus bases, instaladas en Aguilar de Campoo, Baltanás, Fuentes de Nava, Guardo, Herrera de Pisuerga y Saldaña, para sus respectivas zonas de atención: Montaña Oriental, Cerrato, Campos, Montaña Occidental, Boedo y Ojeda, y Páramos y Valles. A ellos se unió en 2019 una séptima cuadrilla, integrada igualmente por un capataz y cuatro peones con base en Frómista, que ha prestado servicios en el Camino de Santiago y las localidades de la ruta jacobea.
Cada actuación viene a durar algo menos de una jornada y media. El promedio de permanencia de la cuadrilla en cada localidad es de tres jornadas aproximadamente. La mayor parte de las labores van encaminadas a prevenir incendios en áreas forestales situadas cerca de los núcleos de población, así como a crear fajas cortafuegos en caminos y carreteras del medio rural, que impiden que surja el fuego por abundancia de maleza, al tiempo que actúan como cortafuegos en caso de incendio.
COMO 193 CAMPOS DE FÚTBOL. Las siete cuadrillas del Plan de Empleo Forestal Local de 2019 han actuado a lo largo del semestre que estuvieron en funcionamiento en 1.376.000 metros cuadrados, una superficie que equivale a unas ciento noventa y tres veces la de un campo de fútbol. Asimismo, intervinieron en trescientos cincuenta y tres kilómetros de carreteras y caminos rurales para crear fajas auxiliares antiincendios, una distancia similar a las que separa las capitales de Palencia y Lugo.
El Plan de Empleo Forestal 2019 ha desarrollado cerca de doscientas actuaciones de prevención de incendios forestales en 127 localidades de la provincia, que ha sido el grueso de la actividad. Pero estas acciones se complementan con otras más puntuales, como los tratamientos silvícolas en trece localidades (más de 220.000 metros cuadrados de intervención) o la veintena de pueblos que se vieron beneficiados de labores de limpieza y desbroce en sus zonas de bodegas (247.000 metros cuadrados). Asimismo, las cuadrillas desarrollaron más de un centenar de trabajos en los entornos de ermitas e iglesias (183.000 metros cuadrados) y de fuentes, miradores y merenderos (137.500 metros cuadrados). La cuadrilla del Camino de Santiago mejoró una veintena de puntos de la ruta jacobea en doce localidades distintas y, con cargo a ese plan, también se efectuaron labores de limpieza, desbroce y señalización en la ruta de bicicleta de montaña ‘Pedaleando por el Románico Palentino’ (60.000 metros cuadrados de actuación), en el Camino Lebaniego (48.000 metros cuadrados), en el Geoparque las Loras (46.000 metros cuadrados) y en el Camino Natural del Tren Secundario de Castilla —el popular tren burra—, en Tierra de Campos (55.000 metros cuadrados).
EQUIPOS Y SEGURIDAD. Todas las cuadrillas disponen de las herramientas, el equipamiento y el vestuario adecuado para sus trabajos, incluidos seis vehículos todo terreno, dos vehículos ligeros, seis remolques ligeros, motosierras, desbrozadoras, pértigas, equipos de protección individual, extintores, botiquines y diversa herramienta manual. Asimismo, todos los operarios contratados reciben formación específica en la prevención de riesgos laborales en las tareas forestales que desempeñan.
Los trabajos consisten fundamentalmente en obras y servicios forestales y medioambientales de interés general y social, ligados a la prevención de incendios en los entornos forestales de los municipios, mediante la eliminación del matorral, poda del arbolado y trituración de restos. De modo complementario, se atienden otras labores de mejora de los entornos de los núcleos rurales, como áreas de esparcimiento y recreo, sendas y caminos peatonales, o accesos a zonas de pesca fluvial y a los montes públicos de las entidades locales.