Una iniciativa que está sirviendo para devolver al monasterio aguilarense parte de su historia, recuperando, a modo de réplicas, los capiteles arrancados del edificio hace 150 años y trasladados al Museo Arqueológico Nacional (MAN) de Madrid.
“Es un sueño hecho realidad”, explica César del Valle, coordinador del centro expositivo Rom, ubicado en el monasterio de Santa María la Real, quien agradece el apoyo de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Castilla y León y, muy especialmente, “a las más de 140 personas que han colaborado, a través de una campaña de crowdfunding en la plataforma de Hispania Nostra, para hacer realidad el proyecto”.
“Nuestro reto es devolver a Aguilar y al público en general parte de su legado cultural”, asegura del Valle. “Con este proyecto será mucho más fácil entender un fragmento esencial de la historia y el arte del monasterio”, añade.
14 réplicas, un bosque románico
El objetivo final es la recuperación simbólica de diez capiteles románicos que en 1871, cuando el monasterio estaba abandonado y en ruinas, fueron trasladados al Museo Arqueológico Nacional de Madrid (MAN), para protegerlos y salvaguardarlos. Gracias a la buena disposición del museo se han podido reproducir las piezas que se expondrán en la antigua capilla del Cristo, hoy convertida en una de las salas del centro expositivo. Las diez reproducciones se sumarán a otras cuatro con las que ya cuenta el centro, conformando así un conjunto, un “bosque románico”, de catorce elementos.
“Nuestra intención es que el público pueda disfrutarlas y verlas también en Aguilar de Campoo, su casa”, apunta el coordinador del Rom. “Al tratarse de réplicas no pueden estar colocadas en su lugar original, no solo porque constituiría un falso histórico, sino porque no están preparadas para ese fin”.
Reproducen algunos de los mejores capiteles del monasterio. Piezas de excelente talla como el caballero victorioso, el Cristo Triunfante, las Tres Marías, la Ascensión o el Descendimiento. Su creación se ha encomendado al equipo de Fundación FACTUM, que se ha servido de las últimas técnicas de digitalización e impresión 3D y del trabajo artesanal para reproducirlas del modo más fiel y riguroso. “El acabado parece real”, asegura César del Valle, “incluso se puedo percibir el deterioro histórico de algunas piezas”.
INTUR
Las réplicas ya se encuentran en el monasterio, donde se está terminando de acondicionar el espacio en el que serán expuestas. El objetivo es que pueda inaugurarse a finales de este año, en el mes de diciembre, justo antes de Navidad. Mientras tanto, el equipo de la Fundación Santa María la Real, llevará el proyecto a INTUR, para darle visibilidad.
“Llevaremos una reproducción del Cristo Triunfante, que servirá para que el público pueda hacerse una idea precisa de cómo son las piezas y de su grado de detalle”, avanza del Valle. No es una de las réplicas, sino un vaciado, preparado para este fin. Junto al capitel, se podrán descargar buena parte de las audioguías que conformarán el recorrido de “Bosque Románico”.
Experiencia sensorial
La iniciativa va mucho más allá. «Junto a los capiteles estamos recuperando 16 maquetas de madera que reproducen otros tantos edificios románicos de la comarca y que fueron creadas por las Escuelas Taller”. Las maquetas ayudarán a contextualizar la evolución del románico.
Igualmente, se crearán dos “estaciones sensoriales”, diseñadas para enriquecer la experiencia del visitante. Una estará dedicada al tacto y permitirá descubrir detalles escultóricos a través de las texturas y la otra será una estación de olores, pensada para evocar los aromas característicos de un taller de cantería medieval.
Bosque Románico es posible gracias al apoyo de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Castilla y León, a través de la subvención para actuaciones turísticas singulares de repercusión regional. Además, ha contado con una campaña de micro mecenazgo, a través de la plataforma de Hispania Nostra, que ha servido para recaudar 11.539 euros, a través de las aportaciones de 142 personas.



