La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando ha otorgado su Medalla de Honor 2014 a la Fundación Santa María la Real. Un reconocimiento a la trayectoria de la institución aguilarense y a su apuesta por convertir el Patrimonio en herramienta generadora de desarrollo socioeconómico.
“Es un honor que una institución de la relevancia de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando haya decidido reconocer nuestro trabajo y nuestra trayectoria“, afirma Juan Carlos Prieto, director de la Fundación Santa María la Real. No en vano, el galardón, instituido por la Real Academia de Bellas Artes en 1943 reconoce la labor de personas o instituciones españolas o extranjeras que se hayan distinguido de modo sobresaliente en el estudio, promoción o difusión de las artes, en la creación artística o en la protección del patrimonio histórico, natural y cultural.
En este último aspecto, la entidad aguilarense tiene mucho que decir. “Aunque la Fundación se constituye como tal en el año 1994, nuestra trayectoria se remonta a finales de los setenta, a la época en la que un grupo de amigos, encabezados por nuestro actual presidente, el arquitecto y dibujante, José María Pérez, Peridis, afronta el reto de restaurar y revitalizar lo que por entonces se conocía como el convento caído, el Monasterio de Santa María la Real“, explica Prieto.
Lo que a muchos les parecía una utopía, poco a poco, se fue haciendo realidad. “No sólo se logró el objetivo y el Monasterio se transformó en Instituto, sino que fue el origen de los primeros programas de Escuelas Taller y Casas de Oficio de España. Un modelo que se exportó con éxito a Latinoamérica, Asia o África y que sirvió para dar formación y empleo a miles de jóvenes“, recuerda el director de la Fundación Santa María la Real.
Referente en innovación
La Medalla llega a ojos del Director General en el mejor momento, “una época de cambio, en la que hemos querido apostar por la innovación“, apunta. En dos ámbitos, el social, con las Lanzaderas de Empleo y Emprendimiento, constituidas como equipos de desempleados, voluntarios, activos y solidarios que, coordinados por un coach, se ayudan y apoyan mutuamente para la consecución de un objetivo común: encontrar empleo, ya sea por cuenta propia o ajena. “Aunque el programa apenas lleva funcionando un año y medio se está extendiendo con éxito por todo el territorio nacional“, informa Prieto, quien recuerda que los tres pilares sobre los que se asienta la entidad son “patrimonio, paisaje y paisanaje” y el apartado social, siempre, se ha tenido muy en cuenta con iniciativas como las Escuelas Taller o la Residencia Tercera Actividad.
Y la innovación aplicada al Patrimonio, que es, sin duda, el trabajo más conocido y reconocido de la entidad. Muestra de ello fueron, en un primer momento, los Planes de Intervención Territoriales, que supusieron un cambio de concepto en la forma de gestionar el Patrimonio. Un nuevo modelo, que hoy se ve completado y actualizado gracias al Sistema de Monitorización del Patrimonio (MHS). “Una herramienta, con múltiples aplicaciones, destinada a garantizar la conservación preventiva de los bienes patrimoniales y su gestión integral, que se está comercializando ya a nivel nacional”.
Promoción y difusión del Patrimonio
La distinción de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando no olvida tampoco la ingente labor de investigación, promoción y difusión del Patrimonio y, especialmente, del arte románico, que la Fundación Santa María la Real ha llevado a cabo con la Enciclopedia del Románico en la Península Ibérica, una colección que cuenta ya con 42 volúmenes y que se encuentra en las principales librerías y bibliotecas del mundo; con portales como Románico Digital y Canal Patrimonio; con el Centro Expositivo Rom, el taller de Ornamentos Arquitectónicos o los diversos cursos y publicaciones sobre cultura medieval, promovidos directamente por la entidad.