Durante los últimos meses, la Guardia Civil de Palencia, ha constatado una problemática con ciertos grupos de personas, que aparecen por los pueblos diciendo ser trabajadores de empresas supuestamente dedicadas a la instalación/revisión de los aparatos de gas.
Desde el 1 de enero al 16 de noviembre de este año, la Guardia Civil ha instruido 10 diligencias por presuntas faltas por estafa y ha imputado a 9 personas, como presuntos autores de las mismas. Se denuncio a otras 5 por incumplimiento a la Normativa sobre Seguridad Industrial.
Las localidades donde se han producido estos hechos han sido: Aguilar de Campoo, Barruelo de Santullán, Castrillo de Onielo, Cevico de la Torre, Guardo, Lomas de Campos, Velilla del Río Carrión, Villaprovedo, Villasarracino y Villodrigo.
Modus operandi
Suelen ser grupos de personas que aparecen por los pueblos manifestando ser trabajadores de empresas supuestamente dedicadas a la instalación/revisión de los aparatos de gas, generando una cierta alarma social, generando denuncias o quejas de los vecinos que temen haber sido víctimas de algún ilícito penal.
En algunos casos, estos supuestos “revisores de gas”, suelen vestir ropas de trabajo con colores más o menos vistosos y logotipos de sus empresas bien visibles, se hacen pasar por personal de la distribuidora oficial, se identifican con carnets de sus empresas con fotografías, llevan carpetas llenas de documentos para rellenar, con los que hacen presupuestos, facturas y seguros de responsabilidad civil por daños, así como contratos de mantenimiento, que carecen de validez.
Cuando algún vecino les pone impedimento para inspeccionar sus equipos o bien se niega a pagar las abultadas facturas que reclaman, les amenazan con cortes del suministro y graves sanciones. Suelen cambiar las gomas y reguladores por caducidad de los mismos.
Aspectos a considerar
Las instalaciones de gas solo pueden ser ejecutadas, revisadas, mantenidas y reparadas por instaladores de gas que tengan los conocimientos teórico-prácticos legalmente requeridos y que se encuentren integrados en una empresa instaladora de gas habilitada.
Las instalaciones de gas butano y propano que no disponen de contador, deben revisarse cada cinco años, una revisión antes de ese plazo solo es necesario si se realizan modificaciones en las instalaciones. El precio de estas revisiones es libre y cada empresa tiene sus tarifas y en ningún caso la empresa instaladora puede forzar al usuario a realizar la inspección aún habiéndose excedido el plazo de los cinco años establecidos para la revisión.
Las instalaciones de gas que disponen de contador por suministro de red, deben ser inspeccionadas por la distribuidora de gas cada cinco años. Dicha revisión podrá llevarse a cabo por la propia distribuidora o por personal subcontratado. La empresa distribuidora de gas suele informar anticipadamente por escrito sobre la fecha de inspección, realizando el cobro de dicha inspección junto a la factura del consumo.
Ningún instalador profesional habilitado puede amenazar con el corte de suministro, el cual solo puede ser ordenado por el órgano competente en materia de Industria de la Comunidad Autónoma. Únicamente y en casos excepcionales, de grave peligro para la seguridad de las personas, el profesional puede cortar el suministro, debiendo informar de tal circunstancia a la compañía aseguradora.
Caducidad de elementos
Gomas: A los 10 años, aconsejándose su sustitución.
Regulador: no caduca, solo se sustituye si estuviera deteriorado y en el cado de sustitución el elemento sustituido es propiedad del dueño de la caso y no se retira.
Aspectos legales a tener en cuenta
El hecho de revisión de una instalación gasística, está perfectamente reglado en la Ley, no es la sustitución de un grifo en una conducción de agua, que puede realizar cualquier persona, con formación o sin ella.
Si la revisión la realiza una empresa no autorizada por la Consejería de Industria, NO puede expedir el certificado preceptuado en el RD 919/2006 y RD 1027/2007 y sí lo hacen. Cobrando por ello, inducen un engaño manifiesto al usuario, pudiendo incurrir en un hecho de estafa.
De la misma manera, si los trabajos son realizados por una persona que no se encuentra acreditado por la Consejería de Industria, no puede expedir el certificado requerido y si lo hace, está vendiendo al usuario un servicio que no posee, por lo que incurre en un hecho de estafa.
Normalmente, estas personas operan de forma organizada, coordinada y reiterada, con el objeto de cometer o promover la comisión de faltas, incurriendo en un delito de asociación ilícita.
El algunos casos, se ha observado también que estos delincuentes, entran en las casas de las víctimas (normalmente personas mayores o con algún tipo de discapacidad), sin su consentimiento, haciendo caso omiso a los moradores que les piden que salgan del domicilio, comenzando a cambiar los elementos sin tener autorización para ello, incluso llegan a dejar el trabajo a medio de hacer si las víctimas llaman a sus hijos, vecinos o Guardia Civil.
Recomendaciones
Las personas que operan con esta forma de engaño, saben que la mayor parte de sus víctimas no presenta denuncia por desconocimiento, quedando impunes sus acciones; por lo que es conveniente que cuando se detecte su presencia en alguna localidad, lo comuniquen a la mayor brevedad posible al siguiente número de teléfono, para activar y realizar los servicios oportunos así como las comprobaciones pertinentes:
La Guardia Civil, dentro del Plan Mayor Seguridad, recordará una vez más todas estas circunstancias, para que se extreme la precaución y cautela, con el fin de evitar hechos similares.