La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León de este lunes, 10 de noviembre, la resolución que delimita las zonas geográficas autorizadas para la producción de patata de siembra en la comunidad. Entre ellas, figuran determinadas áreas de seis municipios de la provincia de Palencia: Aguilar de Campoo, Alar del Rey, Berzosilla, Micieces de Ojeda, Olmos de Ojeda y Pomar de Valdivia.
La producción de patata de siembra en Castilla y León se encuentra actualmente regulada y controlada por la Dirección General de Producción Agrícola y Ganadera de la Junta de Castilla y León para que esté libre de plagas y enfermedades, lo que se certifica de manera oficial.
Por ello, solamente podrá denominarse patata de siembra la procedente de cultivos controlados por los servicios oficiales correspondientes y que cumplan su normativa específica. Palencia es la segunda provincia de la región en superficie de patata de siembra: 392 hectáreas en 2024, lo que representa casi un tercio (32,8 %) del total regional (cerca de 1195 hectáreas), con Burgos como principal provincia productora (774 hectáreas en 2024).
La normativa que regula el control y la certificación de patata de siembra en Castilla y León establece que la producción se lleve a efecto en zonas geográficas autorizadas en función de los motivos técnicos y, en particular, del informe que eleva el Servicio de Sanidad y Certificación Vegetal. Las zonas autorizadas pertenecen a las provincias de Burgos, León, Palencia y Soria.
La superficie de patata de siembra en la provincia de Palencia viene acusando una tendencia descendente, al igual que el total regional, que ha pasado de rondar las 1630 hectáreas en el conjunto de Castilla y León hace una década a las 1195 hectáreas de 2024 (es decir, un descenso desde 2014 de casi el 27 %).
EN DESCENSO. Los agricultores palentinos de patata de siembra destinaron en 2024 la menor superficie del pasado reciente, con poco más de 392 hectáreas, lo que representa un 7,5 % menos que la media de la década anterior (2014-2023). El año 2015 fue el de mayor superficie en ese periodo, con más de 468 hectáreas en el conjunto de la provincia de Palencia.
Dentro de nuestra comunidad, la producción de patata de siembra se centra en el norte de las provincias de Burgos y Palencia, que suman cerca del 98 % de la superficie total de Castilla y León. Constituye un cultivo importante en determinadas localidades, tanto desde el punto de vista agronómico, por su inclusión en las rotaciones de cultivo de las explotaciones; como desde una perspectiva económica, ya que proporciona una rentabilidad superior a otras producciones.
No obstante, la patata de siembra presenta unas variaciones notables de rentabilidad de unas campañas a otras, en función de la coyuntura de producciones y de los precios, muy determinados por la importación, fundamentalmente desde los Países Bajos, con casi dos tercios del total; seguidos por Francia.



