El delegado de la Junta, Luis Domingo González y la alcaldesa de Aguilar de Campoo, María José Ortega, se el pasado jueves en el Arco de Reinosa para conocer de primera mano e in situ en qué va a consistir la actuación de restauración y monitorización del monumento, que abordarán técnicos de la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico.
Los estudios previos realizados por la entidad cultural han servido para determinar que, si bien el conjunto no presenta problemas estructurales graves, algunas deficiencias constructivas y el clima adverso de Aguilar, unidos al tránsito de vehículos, han provocado cierto deterioro en el monumento, perceptible en la suciedad generalizada, en la rotura de algunos sillares y en la presencia de musgos y líquenes en los muros.
Puerta de Reinosa y lápida conmemorativa
La l puerta del Arco, hoy conocida como Puerta de Reinosa, fue declarada Monumento Histórico Artístico el 26 de mayo de 1925. Su estructura es la de un torreón de planta rectangular construido en piedra arenisca que forma parte del antiguo recinto amurallado de la villa de Aguilar. Una de las piezas más destacadas del monumento es una lápida de piedra caliza de 1381, conmemorativa de la construcción de la torre. Su singularidad radica en que es de las pocas que conservan una inscripción trilingüe en hebreo, castellano antiguo y hebreo aljamiado.
Intervención en tres fases:
El proyecto plantea una actuación en tres fases con el fin de garantizar la conservación de la pieza y paliar los daños que afectan al conjunto En primer lugar, se extraerá la lápida conmemorativa, garantizando en todo momento su seguridad, se recogerán muestras para analizar su composición y se trasladará al taller de la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico.
El hueco que deje el sillar se rellenará, inicialmente, con mortero de cal y se procederá a la limpieza superficial de la Puerta de Reinosa, así como a su monitorización, mediante la instalación del sistema MHS. La colocación de 18 sensores inalámbricos servirá para controlar en todo momento las condiciones de temperatura, humedad y luminosidad que afectan al monumento.
En una segunda fase, se procederá a la restauración de la lápida conmemorativa y a su digitalización, para poder obtener un modelo virtual, que permita tallar una reproducción idéntica, en el mismo tipo de piedra.
La última fase consistirá en la colocación del sillar conmemorativo original en el consistorio para protegerlo y garantizar su conservación. En el espacio elegido para su ubicación se instalará un hito informativo, con un código QR que permita a los visitantes ampliar información sobre el monumento y una pantalla en la que se podrán visualizar en tiempo real los datos que van arrojando los sensores instalados en la Puerta de Reinosa. Allí se colocará otro hito informativo y la reproducción del sillar en el lugar que ocupaba la piedra original. Los datos que arroje la monitorización servirán para determinar el destino final de la lápida original y de su reproducción.