La Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, a través de la Dirección General de Carreteras e Infraestructuras, inicia el expediente de emergencia para comenzar esta semana los trabajos de restauración de los desperfectos ocasionados tras la rotura ayer de uno de los arcos del puente sobre el río Carrión en Saldaña. Estas obras se llevarán a cabo con la máxima celeridad con el objeto de poder restablecer el tráfico de vehículos lo antes posible, para el que se han establecido desvíos alternativos.
El martes, 14 de enero, se produjo la rotura del tímpano en uno de los 22 vanos del puente sobre el río Carrión en el municipio palentino de Saldaña, por el que circula la carretera autonómica CL-615, de Palencia a Guardo. Nada más producirse la incidencia, por motivos de seguridad vial se procedió a cortar el tráfico, estableciéndose los correspondientes desvíos, bien por el interior de la localidad de Saldaña para el tráfico local, o bien a través de las carreteras P-241 y P-240 para el tráfico de largo recorrido.
Con carácter inmediato, ayer se personaron técnicos de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y especialistas en la reparación de este tipo de estructuras para evaluar la actuación y estudiar la solución más adecuada, lo que ha motivado el inicio inmediato de un expediente de emergencia que contemple la ejecución de las obras necesarias para la reparación de los desperfectos y poder restablecer el tráfico lo antes posible.
Aunque en principio se trata de una incidencia que no puede considerarse grave, más allá de la repercusión en la funcionalidad de la carretera y las molestias que se deriven para los usuarios, simultáneamente, y también con carácter inmediato, la Junta va a volver a realizar una inspección de todo el puente para determinar si las riadas del pasado diciembre han podido provocar algún tipo de desperfecto en el resto de arcos de la estructura. El inicio de los trabajos de reparación de este puente de Saldaña está previsto en esta misma semana.
La causa de esta rotura es consecuencia de las inundaciones del pasado mes de diciembre, que dieron lugar al desbordamiento de los ríos en Castilla y León. En este puente de Saldaña la Consejería de Fomento y Medio Ambiente había practicado hace un año una inspección por un equipo de ingenieros de Caminos especializados en estructuras, como se ha hecho en la mayoría de los 3.000 puentes de los 11.500 kilómetros de carretera titularidad de la Junta en Castilla y León. Dicha inspección concluía que este puente de Saldaña no necesitaba actuaciones en un corto plazo, pues no contaba con daños funcionales graves o que afectaran a su resistencia.