Maite Rodríguez Corrales y Rebeca Corada Tobalina, integrantes de las Lanzaderas de Empleo de Palencia y Aguilar de Campoo, han puesto en marcha sus propios negocios: una consultoría pedagógica en la capital y un centro de osteopatía en Polientes (Cantabria), respectivamente. Ambas relatan su experiencia emprendedora y lo aprendido con sus compañeros en las Lanzaderas, puestas en marcha por Fundación Santa María la Real, con la colaboración de Obra Social ‘la Caixa’ y Fundación San Cebrián.
La I Lanzadera de Empleo y Emprendimiento Solidario de Palencia finaliza esta semana su actividad tras casi nueve meses en funcionamiento. En este tiempo, a través de múltiples dinámicas de trabajo grupal y mejora de la empleabilidad, el foro de empleo, las visitas a empresas y las intermediaciones laborales, el equipo ha logrado que 17 de sus 20 integrantes hayan modificado su situación laboral, registrando así un resultado de inserción del 85%.
“Cuando hacemos balance de Lanzaderas, nos solemos centrar casi siempre en los casos de inserción por cuenta ajena. Cierto es que son la mayoría, que los resultados son muy gratificantes, pero las Lanzaderas también tratan el emprendimiento, y hay compañeras de Palencia y Aguilar que han aprovechado su participación en el programa para emprender su propio negocio; queremos hacer especial hincapié en estos casos”, explica Rodrigo Aguilar, coordinador de la I Lanzadera de Empleo de Palencia.
Consultoría pedagógica
Maite Rodríguez Corrales es una joven pedagoga que en enero llegó a la Lanzadera de Empleo de Palencia para cambiar su situación laboral y finalmente lo ha logrado. “Toda mi trayectoria profesional está ligada a la pedagogía, a guiar a las personas en la búsqueda de nuevas alternativas. Las personas de mi entorno me habían animado a emprender, pero no ha sido hasta mi participación en la Lanzadera, con el apoyo de todo el equipo, con los contactos hechos, cuando realmente he sentido que podía poner en marcha mi propio negocio”, explica Maite, que reitera que su paso por el programa LEES “ha significado un antes y un después; ha supuesto no sólo volver a tomar el rol de pedagoga, sino una actualización de competencias laborales, nuevas formas de trabajar y un verdadero máster vivencial en Recursos Humanos”.
Con esta premisa, Maite Rodríguez ha puesto en marcha su negocio: Orienta-M, una consultoría pedagógica ubicada en el Centro Goal de Idiomas, (calle Mayor, 136). Ofrece atención directa a personas desempleadas, estudiantes en búsqueda de nuevas soluciones laborales y formativas, becas o empleo; además de asesoramiento a colegios, centros formativos o empresas que buscan formación para sus trabajadores. “Apuesto por la colaboración entre profesionales, ya que mi trabajo es transversal”, añade Maite, cuya actividad se puede consultar también en el blog orientamay.wordpress.com y en redes sociales.
Es consciente de la dificultad de emprender en la coyuntura actual, pero anima a otros jóvenes a seguir su ejemplo y apostar por lo que uno quiere y le apasiona. “Ahora bien, para ello es necesario previamente conocerse bien, tener un proyecto muy meditado y planificado, y entender los posibles riesgos o fracasos como un aprendizaje positivo”, advierte Maite, quien defiende la formación como la mejor herramienta para potenciar el espíritu emprendedor. “No obstante, conviene matizar que no sólo es emprendedor la persona que pone en marcha su propia empresa, sino la que tiene inquietudes por avanzar en su puesto de trabajo”, concluye Maite.
Centro de Osteopatía
La II Lanzadera de Empleo de Aguilar de Campoo finalizará su actividad la próxima semana. Desde enero hasta la actualidad, 17 de sus 20 integrantes han modificado su situación laboral, logrando un resultado de inserción del 85%. Igual que en Palencia, una gran parte de los participantes ha logrado, con su esfuerzo y trabajo constante, contrato por cuenta ajena; hay otros que han optado por especializar o ampliar sus estudios, pero el emprendimiento, se ciñe exclusivamente a una compañera.
Es el caso de Rebeca Corada Tobalina, joven licenciada en Educación Física que llegó a la Lanzadera en enero, procedente del municipio cántabro de Polientes y tras una etapa anterior trabajando como profesora en colegios de Madrid. “Era el momento de dar el paso de la ciudad al medio rural, del trabajo por cuenta ajena al negocio propio”, explica Rebeca, que tras un tiempo de tramitaciones y obras de reforma en un local de la Plaza Mayor de Polientes, en junio abrió su Centro de Osteopatía “Cuídate”.
El negocio marcha bien, con tratamientos de osteopatía y masajes, pilates, rehabilitación y entrenamientos personalizados a una cartera de pacientes que va creciendo progresivamente en la comarca del Valle de Valderredible. “Están contentos con el servicio, esa es la mejor carta de presentación para el negocio. Ahora bien, también hay que saber atender sus necesidades correctamente, posicionarse en el mercado y saber “venderse”, de eso he aprendido también en la Lanzadera”, añade Rebeca, que ha encontrado colaboración de sus propios compañeros para el diseño de tarjetas de visita o para la puesta en marcha de una futura web del centro.
Tercera de Aguilar
El cierre de las tres lanzaderas de la provincia de Palencia es escalonado. Palencia lo hará esta semana; Aguilar II la próxima, y Aguilar III dará por concluida su actividad el 30 de septiembre. Hasta entonces, sus integrantes apuran los últimos días reforzando el contacto directo con empresas, visitando factorías y realizando intermediaciones laborales. “Es una lanzadera exprés, en apenas tres meses hemos logrado casi el 60% de inserción y esperemos que los contactos de estos últimos días tengan resultado positivo”, explica su coordinadora Ana Boada, quien recuerda que hay algún integrante que sigue dando vueltas al tema del emprendimiento, como es Laura García, con una idea vinculada al teatro social. Casualidad o no, de nuevo, mujer, joven y emprendedora.