Un centenar de alumnos de la Montaña Palentina han podido participar en el taller ‘Que me quiten lo pastao’. Una iniciativa del Ayuntamiento de Brañosera y la Fundación Santa María la Real para acercarles a los recursos de la comarca y al oficio del pastoreo.
La idea forma parte del proyecto ‘Paisaje y Trashumancia’ que es posible gracias al apoyo de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio.
“El taller es, quizá, una de las actividades más dinámicas y gratificantes, pero no la única”, explica María Jesús Barbero, responsable del proyecto Paisaje y Trashumancia, quien avanza que durante el mes de octubre se realizará también un seminario dirigido a dar a conocer el paisaje identitario de la Montaña Palentina.
Por ahora, alrededor de 100 niños y niñas de 6º de Primaria (11-12 años) de los colegios de Aguilar de Campoo, Barruelo de Santullán y Cervera de Pisuerga, han podido participar durante los meses de mayo y junio en el taller ‘Qué me quiten lo pastao’. La experiencia recuerda María Jesús ha sido muy positiva, tanto para los organizadores, como para los participantes.
Primer paso: concienciar
El taller se ha dividido en dos sesiones. El primer paso ha sido acercarse a las aulas para explicar a los participantes en qué consiste el oficio del pastoreo, así como su importancia en el diseño y conservación de los paisajes.
“Les hemos enseñado, por ejemplo, que las cabras o las ovejas actúan como auténticas desbrozadoras y su labor es esencial para prevenir incendios”, cuenta María Jesús. Todo ello de un modo lúdico y didáctico, a través de vídeos y juegos.
Segundo paso: experimentar
Con la parte teórica, más o menos dominada, llegó la segunda sesión y con ella, la salida al campo, para comprobar in situ cómo se maneja un rebaño de cabras, visitando para ello los montes de Brañosera.
“Quisimos completar la salida con una visita al museo etnográfico de Piedad Isla en Cervera de Pisuerga que conserva y mantiene la memoria de buena parte de estos oficios y de la comarca”, apunta la responsable del proyecto. ¡Ah! y para completar la jornada pusieron en práctica juegos tradicionales como el “salto de la gayata” con una cachaba o gayata de pastor.
Brañosera: tierra trashumante
Los más pequeños han sido, hasta el momento, los principales destinatarios del proyecto, que tiene una clara vocación educativa y de concienciación. Ahora, María Jesús y el resto del equipo están volcados en la organización de un seminario, que se desarrollará el 9 de octubre en Brañosera, contará con cuatro expertos e incidirá en conocer mejor el paisaje de la Montaña Palentina.
La jornada llevará por título ‘Brañosera, tierra trashumante: paisaje, cultura y futuro’ y se verá completada “con una publicación que recogerá las ponencias del seminario”, concluye la responsable del proyecto.