El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez, y el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, han acordado buscar la infraestructura más adecuada para la instalación de la base de emergencias y habilitar el presupuesto necesario para la contratación de personal. La puesta en marcha de este servicio queda condicionada a la disponibilidad de profesionales.
El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez, y el delegado territorial de la Junta en Palencia, Luis Domingo González, han mantenido hoy una reunión con el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco, para analizar la situación de la asistencia sanitaria en el municipio y, en particular, la demanda planteada por el Ayuntamiento de dotar a la zona de una UVI medicalizada para la atención a las emergencias en la zona.
Ambos responsables han analizado en contenido de la Ley 4/2011 de directrices de la Montaña Cantábrica Central y, en particular, su artículo 12 que establece: “En el marco del estudio global de necesidades se considera prioritario dotar a la Zona Básica de Salud de Guardo de una UVI móvil (Unidad Medicalizada de Emergencias), para disminuir los tiempos de acceso de los ciudadanos a la asistencia sanitaria urgente especializada”. Atendiendo a ese mandato legislativo, una vez solventados los principales problemas de contención presupuestaria derivados de la crisis económica, el consejero ha manifestado la voluntad política de la Consejería de tomar las iniciativas necesarias para la dotación de una Unidad Medicalizada con base en Guardo.
Sáez ha informado de las necesidades asociadas al mantenimiento de una UVI móvil: su coste -1.010.000 euros anuales-; las necesidades de infraestructuras –espacios de 170 metros cuadrados para el personal y 60 metros cuadrados para el vehículo- y las necesidades de profesionales: la incorporación de seis médicos y seis enfermeros en la plantilla de Sacyl que permita para la atención 24 horas al día, así como conductor y técnico de transporte con cobertura permanente por parte de la empresa concesionaria del transporte.
El alcalde y el consejero han acordado proceder a la búsqueda de la infraestructura más adecuada para la instalación de la base de emergencias, comprometiéndose el primero a facilitar todo lo posible la nueva ubicación. Antonio María Sáez ha señalado además que la Gerencia Regional de Salud habilitará el presupuesto necesario para la contratación del personal. Pero ha señalado la dificultad de incrementar la plantilla dado que en la actualidad no existen profesionales disponibles; en la bolsa de empleo no existen candidatos para poder ser contratados.
Por lo tanto, se tomarán las medidas necesarias para habilitar la base de la Unidad Medicalizada, que iniciará su funcionamiento en la medida en que Sacyl pueda contar con nuevos profesionales. El consejero ha planteado su confianza en que con la próxima resolución de la oposición de médicos de familia puedan incorporarse nuevos efectivos para prestar este servicio, aunque buena parte de quienes han aprobado esa oposición ya trabajan en Castilla y León de forma interina. También ha señalado que en la medida en que puedan cubrirse parcialmente estos puestos, la UVI móvil podrá, transitoriamente, iniciar su actividad con un horario ajustado al número de profesionales disponibles hasta completar la plantilla de seis facultativos médicos y seis enfermeros.