El equipo cántabro formado por José Luis Madrazo y Marcos Domingo, a bordo de un imponente BMW 635 CSI de 1986 estrenado para la ocasión, se llevó la victoria final en la séptima edición del Rallye de Coches Clásicos Montaña Palentina -Memorial “Mimi”-, prueba celebrada el sábado 8 de agosto con base en Cervera de Pisuerga. Esta multitudinaria cita, sacada una vez más adelante por la Escudería Montaña Palentina Racing, contó con el apoyo indispensable del Ayuntamiento de Cervera de Pisuerga y la Fundación Provincial de Deportes de la Diputación de Palencia, siendo la séptima prueba puntuable para la Copa de Clásicos de las Escuderías de Cantabria 2015 en las categorías Copa, Trofeo Open Classic, Trofeo Open Pre 80 y Trofeo de Escuderías.
De esta forma, las inmediaciones de la Plaza Mayor de la localidad fueron de nuevo el escenario elegido para formar el vistoso parque cerrado y dar el banderazo de salida del rallye a partir de las 12:30 horas, siendo la tónica de la matinal del sábado la espectacular afluencia del entusiasta público, entregado al cien por cien ante los pilotos y sus singulares máquinas en el que se ha convertido por méritos propios en uno de los eventos estrella del verano en el municipio.
En el terreno deportivo, los nada menos que 67 equipos presentes pudieron disfrutar de los alicientes que las carreteras del norte palentino y de la vecina Cantabria, además del norte de León como nuevo reto, les ofrecieron en una jornada perfecta para la práctica del automovilismo. Entre el extenso plantel de participantes no sólo destacó la variada procedencia de los mismos, venidos de zonas como Cantabria, Euskadi, Madrid y diversas provincias castellanoleonesas, sino el nivel de élite de muchos de ellos. Sin lugar a dudas, esta resultó ser una de las ediciones más emocionantes al poderse disfrutar de las evoluciones de los más de 22 participantes que contaban en su haber con alguna victoria en la disciplina de la regularidad a lo largo de los últimos años, dándose además la circunstancia añadida de que se enfrentaban en un terreno “neutral” para la mayoría de ellos.
La caravana de vehículos clásicos afrontó un recorrido de 279 kilómetros totales, de los cuales 186 correspondieron a los 12 tramos de regularidad celebrados. Puntos como Perazancas de Ojeda, Olmos de Ojeda, Cozuelos de Ojeda, Barrio Santa María, Salinas, Bustillo de Santullán, Revilla de Santullán, Perapertu, Rueda, Parador de Cervera, Vañes, Alto de Piedrasluengas, Alto de San Glorio, Boca de Huérgano, Velilla de Río Carrión,Triollo o Ventanilla, no faltaron en el rutómetro de esta edición. Además, el rallye propiamente dicho fue aderezado con distintas modalidades de regularidad a medida que avanzaba la jornada, caso de tramos a tablas o hitos, realizándose el reagrupamiento para reponer fuerzas en San Salvador, con una estupenda barbacoa para reponer fuerzas en el ecuador de la jornada.
Vencedores por categorías. Tras un total de 179 controles secretos computados, José Luis Madrazo y Marcos Domingo se adjudicaban la victoria (73,0 puntos) tras una ajustada pugna con Angel Tomás Pérez y Marian Enrique a bordo del Renault Fuego (76,6 puntos), mientras que el podio final lo completaban Miguel Muñoz y José Mª Reviejo con un Volkswagen Golf GTI (79,4 puntos). En lo que respecta al apartado Open Classic, el tándem local formado por Luis Ángel Monterrubio y Nerea Méndez repetían su victoria de la pasada edición, aunque esta vez a los mandos de un bonito Volkswagen Scirocco, haciendo lo propio en el apartado de escuderías Rallymiglia Classic Team.
Con los participantes haciendo rugir sus máquinas a su llegada a Cervera de Pisuerga y el público totalmente impregnado por este evocador ambiente, se ponía el punto y final esta séptima edición, la cual, además del ya citado empuje institucional no hubiese sido posible sin el apoyo de la iniciativa privada, la hostelería de la zona y las empresas colaboradoras de la Copa de Escuderías con sus habituales aportes en la entrega de trofeos y el sorteo de regalos.