El Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de Cervera de Pisuerga ha decretado el sobreseimiento provisional de la investigación por la desaparición de las niñas de Aguilar de Campoo en el año 1992 “al no constatar autor conocido en la perpetración de los hechos”.
Recordamos que Virginia Guerrero y Manuela Torres, de 14 y 13 años desaparecieron el 23 de abril de 1992 después de que acudieran desde Aguilar de Campoo, donde residían hasta Reinosa, allí fueron vistas por última vez haciendo autostop, según algunos testigos presenciales, a ultima hora de la tarde subieron a un vehículo Seat 27 color blanco.
Según el auto dictado por el Juzgado de Cervera “la decisión judicial de decretar el archivo o el sobreseimiento de un procedimiento en trámite, por entender que los hechos objeto de las mismas no aparece debidamente justificada la perpetración del delito o por no existir indicios racionales de criminalidad contra una persona determinada”.
Las familias de las niñas, según publican algunos medios, recurrirán el archivo del caso.