El pasado sábado, 5 de agosto, la extensión de ‘En un lugar del Norte’ programada en Aguilar de Campoo congregaba en la Plaza de la Torrejona a cientos de personas. De esta forma, el evento conseguía el respaldo de un público que no dejó pasar la oportunidad de disfrutar de la tradición y de la música en femenino. Y es que, un año más, esta cita organizada por BPM Cultural a través del Ayuntamiento de Aguilar incluyó un taller de pandereta y varios conciertos.
Así, por la mañana, una veintena de personas -la mayoría mujeres, pero también varios jóvenes de la localidad- participó en la actividad impartida por la librera y panderetera Cris Zagaleja. La segunda edición del taller ‘La pandereta en la Montaña Palentina’ tuvo lugar de 11 a 14 horas y, por segundo año consecutivo, resultó ser todo un éxito. Enmarcado en el apartado ‘Con estas manos del Norte’, este taller mostró las técnicas, expresiones, repertorios y usos de la pandereta en la zona.
Ya por la tarde, antes del concierto de la cantante y guitarrista local Isabel Cabañas, tuvo lugar la actuación de un grupo de pandereteras que, liderado por Cris Zagaleja, animó el ambiente en la céntrica Plaza de la Torrejona. Acto seguido, los espectadores disfrutaron del breve pero intenso repertorio de la joven artista aguilarense, quien sorprendió con su privilegiada voz.
Para hacer honor al nombre del festival y, como suele ser habitual en Aguilar a partir de cierta hora, no faltó la presencia del incómodo y frío viento del norte. Sin embargo, las bajas temperaturas perdieron la batalla frente a la calidad del concierto que ofreció Marisa Valle Roso. La artista asturiana emocionó a los asistentes, personas de todas las edades que aguantaron estoicas hasta el final y que se fueron con el mejor sabor de boca después de contemplar un espectáculo único en el que el folclore astur, la tradición minera y la música de raíz se fusionaron con las atmósferas electrónicas y los tintes pop.
Finalizada la actuación de Marisa Valle Roso, fue la artista gaditana La Mare la encargada de levantar al público aguilarense a través de una propuesta basada en la fusión rítmica, la frescura y la raíz iberoamericana. Quienes se quedaron a verla tuvieron la oportunidad de bailar y cantar algunos de sus temas más populares, canciones en las que destaca la intimidad y el compromiso de sus letras. La Mare y su banda plantaron cara al frío y se aliaron con la noche para cerrar por todo lo alto la programación de ‘En un lugar del Norte’, que, de nuevo, apostó por las mujeres en su programa para la villa galletera.
BALANCE POSITIVO. Desde el Ayuntamiento de Aguilar de Campoo, la concejala de Cultura, Soraya Isasi, hace un “balance positivo” de esta iniciativa, para la que se barajan diferentes fechas y ubicaciones de cara a su edición 2024. La idea del Consistorio aguilarense es buscar un escenario más apropiado para acoger los conciertos. La concejala también opina que “se podría buscar otro fin de semana” y valora la alternativa de “establecer un horario más temprano” para que la programación no se vea afectada por el famoso viento norte de Aguilar.