El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha participado, en el Ecomuseo de la Lana Merina Trashumante de Salamón, Crémenes (León) -que inauguró el pasado año-, en el acto sobre la trashumancia, en el que mostrado su apoyo a las iniciativas como la del proyecto Ovinnova, presentado hoy para mejorar la competitividad de este sector. El consejero ha recordado el apoyo de la Junta a la mejora de los principales pastaderos utilizados por el ganado trashumante en los puertos, sobre todo de León y Palencia, así como en la conservación y mejora de las infraestructuras de la red de vías pecuarias de Castilla y León, la más extensa de España.
El apoyo institucional de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente queda patente por el testimonio del acto celebrado el sábado, en el Ecomuseo de la Lana Merina Trashumante en Salamón, que fue inaugurado por Juan Carlos Suárez-Quiñones el pasado año, y en cuya financiación ha colaborado la Junta con 100.000 euros. Tras el acto institucional -presentado por el alcalde de Crémenes, Ángel Miguel Alonso; la presentación del grupo operativo Ovinno por Raúl Muñiz, presidente de Interovic; un retazo de historia a cargo del periodista y escritor Fulgencio Fernández y la clausura del consejero-, los asistentes han visitado este ecomuseo de la trashumancia.
En los trabajos del grupo Ovinnova está colaborando la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, a través de la implicación directa de la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal y de los servicios territoriales de Medio Ambiente, que gestionan los principales pastaderos utilizados por el ganado trashumante en los puertos de los municipios de las montañas de León y Palencia, así como colaborando con los estudios que está llevando a cabo la Universidad de León.
El proyecto presentado hoy incide en el impulso de la trashumancia a través de la creación de un nuevo modelo de negocio que contribuya a preservar la biodiversidad.
Asimismo, la Junta colabora en la candidatura presentada a mediados de este mes para el proyecto Life Oviodiversa, que trata de impulsar estos mismos temas, coordinado por Cesefor, una iniciativa con diez socios de España, Alemania, Bulgaria y Rumanía, entre los que se cuenta Junta de Castilla y León. Si el proyecto fuera aprobado, contaría con una inversión de casi 3 millones de euros para los próximos años. De otro lado, está prevista igualmente la firma próxima de un protocolo de colaboración con la Fundación Monte Mediterráneo, representada aquí por su presidenta, Ernestine Ludeke, que mantiene desde hace una década una valiosa iniciativa para recuperar la trashumancia entre la Montaña Cantábrica y las dehesas del sur.
La Junta colabora en la gestión de pastos de puertos y la mejora de sus infraestructuras
Desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente se sigue trabajando en la gestión de los pastos de puerto y en la mejora de sus infraestructuras, como el reciente arreglo de la pista de acceso al puerto de Piedrahita, en Palencia, y se espera poder avanzar mediante la mejora o reconstrucción de los chozos, accesos y desbroces.
Las ovejas merinas constituyen un valor y un capital extraordinario que estas montañas y sus gentes han dado al mundo, por la calidad de su lana, que es única y extraordinaria. Los habitantes de estas localidades han legado unos extraordinarios conocimientos del manejo de la tierra y del aprovechamiento sostenible de los hábitats de esta Montaña Cantábrica que han conformado un paisaje extraordinario, cuyo núcleo hoy está protegido como Parque Nacional y parte de la Red Natura 2000 de la Unión Europea. Estas actividades y aprovechamiento sostenibles suponen la forma de vida y el futuro de muchas personas, de muchos pueblos y es también futuro, con el apoyo de las instituciones.
Un trabajo fundamental es el mantenimiento y mejora de la Red de Vías Pecuarias de Castilla y León, con más de 32.000 km (la más extensa de España), lo que representa más del 25 % del total de la red nacional. La Junta de Castilla y León trabaja en su conservación y mejora, adecuándola a los nuevos usos; el uso pecuario tradicional ha perdido relevancia y todo hace prever que el uso público recreativo se convierta en el principal de la mayor parte de la red.
Es tarea de todos recuperar este valioso patrimonio cultural, natural e inmaterial, que constituye la trashumancia, pero gracias, sobre todo, a los pastores, a los ganaderos y a los propietarios de los puertos, que son los auténticos protagonistas de una jornada como la de hoy y los protagonistas, día a día, del trabajo que permite mantener esta actividad, en el objetivo de mejorar las condiciones de los chozos, para que dispongan de luz eléctrica, de agua caliente y una ducha, y de repetidor de teléfono, para que mantengan el contacto con los suyos y para garantizar el futuro de esta actividad.