En estos últimos días, consumidores y usuarios están recibiendo cartas en sus domicilios, imitando perfectamente los anagramas y colores de entidades financieras -incluso con códigos de barras- solicitándoles datos personales, basándose en la obligación que tienen las entidades financieras, por imperativo legal, de actualizar y verificar periódicamente la información y documentación de sus clientes.
Les piden que les remitan a una determinada dirección de correo electrónico una serie de documentos:
- Fotocopia del DNI en vigor. Caso de no disponer del mismo, puede también remitirles copia del pasaporte o del carnet de conducir (modelo actual), siempre y cuando estén vigentes.
- Documento acreditativo de su actividad. A estos efectos puede remitir copia de cualquiera de los siguientes documentos: última declaración de la renta, justificante de ingresos del último mes (nómina o pensión) o declaración de IVA del último año, trimestre o mes, en caso de trabajadores por cuenta propia.
- Recibo domiciliado (tipo luz, teléfono o similar) en el que conste, al menos, su nombre y domicilio.
Asimismo, les dicen que para cualquier duda o aclaración pueden ponerse en contacto con ellos mediante correo electrónico a la dirección antes mencionada, o en cualquiera de una serie de teléfonos que dan, en horario de 8 a 17 horas.
Finalmente les amenazan diciendo que, en caso de no recibir la documentación solicitada, procederán al bloqueo de su tarjeta/s en una fecha próxima (generalmente un mes), al no poder dar cumplimiento a los requerimientos a los que la normativa vigente les obliga. Se despiden agradeciendo de antemano la colaboración y piden disculpas por los inconvenientes que puedan causar.
“Todo suena muy plausible, pero es completamente falso. Se trata de un intento de estafa. Puestos en contacto con la entidad financiera que, muy astutamente, tratan de simular, nos han corroborado que, como es lógico, ellos no han enviado ese tipo de cartas”, señalan desde UCE Palencia.
Y es que ninguna entidad financiera o de cualquier tipo pide a sus clientes ese tipo de datos por escrito. En todo caso, si precisan algún documento, piden que se les lleve directamente a su entidad. Todo lo contrario suena enseguida a intento de estafa.
Por eso, la Unión de Consumidores de Palencia aconseja que no se facilite a nadie documentación o datos personales por correo electrónico, por carta o por teléfono, sin saber previamente con seguridad de quien se trata. La documentación que piden es suficiente para poder timar o hacer desfalcos, incluso para delinquir en su nombre.