Las cuatro plataformas en defensa de la sanidad pública de nuestra provincia: Anhelo (Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Aguilar y comarca); Plataforma Pro-hospital comarcal de Guardo; Tú Haces Comarca (Tierra de Campos); y Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública de Palencia; han denunciado la situación sanitaria que se está viviendo en la provincia de Palencia y han pedido, entre otras cosas, que se constituya una comisión de trabajo para estudiar a fondo la actual situación del personal del SACyL.
Así lo explican en el siguiente comunicado:
“Lo último que se puede esperar de un consejero de Sanidad es que reúna a los alcaldes de una comarca de la montaña palentina, que está viviendo horas de angustia al sentir amenazada la protección de su salud por falta de médicos y médicas, para lamentarse por la fatalidad que les ha caído encima, como si de una catástrofe natural se tratara. Sr. consejero Antonio M. Sáez de Aguado, bien sea porque no quiere, no sabe o no puede, deje su cargo para que lo ocupe otra persona, tal vez con nuevas y mejores ideas o intenciones.
Las Plataformas en Defensa de la Sanidad pública de C.y L., en el Consejo Castellano-leonés de Salud celebrado el pasado 3 de Julio a instancias de éstas, le hacían, entre otras, las siguientes propuestas:
• Que se constituya una comisión de trabajo, en el seno del Consejo Regional de Salud, para estudiar a fondo la actual situación del personal del SACyL y la consiguiente elaboración de las líneas de trabajo de un Plan que, en colaboración con el conjunto de instituciones públicas dedicadas a la docencia en ciencias de la salud y con los hospitales y centros asistenciales públicos con capacidad de docencia, en el menor tiempo posible, sirva para resolver de forma ordenada y planificada, las carencias existentes y las previsibles que surgirán a corto plazo en ese ámbito.
• Que se constituya una comisión de estudio y búsqueda de soluciones de la Atención Primaria, especialmente en el medio rural.
Hasta la fecha, ningún pronunciamiento de su parte para propiciar que salgan adelante estas propuestas, que nos pondrían en el camino para ver algo de luz en el túnel, lo que denota el escaso interés por que estas situaciones no se vuelvan a repetir, incluso agravar en un futuro bien próximo.
Esta falta de voluntad de la Junta de C.y L., por solucionar las deficiencias de personal en el sistema sanitario público, es la que vienen denunciando las numerosas plataformas que han surgido, como en Palencia, en todo el ámbito de la Comunidad:
1. Porque habiendo una previsión, por la propia consejería de sanidad en 2008, del déficit de profesionales en Medicina de Familia, ha habido una pérdida acumulada desde 2010 hasta 2018 de 311 plazas de formación M.I.R. en esa especialidad y en esta Comunidad. Dicho de otro modo, hoy podría haber en C.y L. 311 Médic@s de Familia más, los que necesita Barruelo, Brañosera y el C.S. de Aguilar, Guardo para poner en funcionamiento su U.V.I. móvil, Frómista para que dejen de colgar el cartel “hoy no hay consulta”, … etc.
2. Porque han expulsado de nuestro territorio a las profesionales médicas, por la precarización de sus condiciones de trabajo, la disminución de salarios, el aumento de la interinidad para puestos estables (hasta provocar el reproche de las instituciones europeas y la condena del T.S.J. de C.y L. a la Junta el pasado Nov./17, por encadenar contratos temporales consecutivos, durante 8 y más años, para puestos de trabajo fijos).
3. Porque han dejado pudrir el asunto de los médicos funcionarios interinos, que trabajan principalmente en la sanidad rural, hasta el punto de que ahora convocan una huelga el 1 de agosto, que contribuirá a que este verano pase a los anales de la historia de nuestros pueblos por el caos en su sanidad.
4. Porque habiendo también necesidad de personal de enfermería, fisioterapia, trabajo social, etc. en nuestra sanidad rural, tampoco contratan a estas profesionales, muchas de ellas en el paro o en trabajos precarizados, deseosos de ocupar un puesto en la Sanidad Pública.
Pocos casos hay con tantos méritos acumulados para decir bien alto, emulando aquella frase ya histórica en el Parlamento, ¡váyase Sr. consejero, váyase!”.