Nueve personas, 6 mujeres y 3 hombres, han iniciado esta semana una nueva edición del programa mixto de atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales, financiado por la Junta de Castilla y León.
Durante seis meses, se formarán y trabajarán en Tercera Actividad, el centro de atención a personas mayores y/o dependientes que la Fundación Santa María la Real gestiona en la localidad palentina de Aguilar de Campoo.
Desde el inicio del programa, las nueve personas participantes, disponen de un contrato de formación a jornada completa con cotización en la Seguridad Social y reciben un salario mensual correspondiente al 100% del importe del salario mínimo interprofesional.
Formación teórico-práctica
Hasta el 31 de agosto participarán en esta acción formativa que comprende 900 horas de formación teórico – práctica. Pero, ¿en qué consiste exactamente? “El programa consta de cuatro módulos formativos: dos de carácter psicosocial y de organización, y dos de carácter higiénico-alimentario y sanitario”, explica Nuria Estalayo, coordinadora de la actividad, para concretar que gracias a ello los participantes aprenden “a tratar de la forma más adecuada a las personas dependientes, al margen de su edad o grado de dependencia”.
Así, por ejemplo, aprenderán a prestar apoyo a las personas mayores y/o dependientes en las distintas actividades de su vida diaria como movilizaciones, higiene o alimentación. También se formarán para poder comunicarse más fácilmente, escucharles, apoyarles, animarles o acompañarles y, cómo no, al finalizar el curso, serán capaces de detectar cualquier cambio significativo que precise de una mayor atención. “Lo que más valoran los participantes, sin duda, es la posibilidad de poner en práctica desde el primer día los conocimientos adquiridos y las muchas oportunidades profesionales que les ofrece este certificado”, comenta Estalayo.
Múltiples salidas profesionales
De hecho, el certificado que les acredita como profesionales de la atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales les da acceso no solo a instituciones, ya sean residencias, centros de día u otras, sino también a desempeñar tareas de cuidado cualificado en el hogar. Un sector en el que existe una gran demanda de empleo, especialmente para gerocultores, capaces de ofrecer una atención personalizada, cercana y profesional. “La experiencia de anteriores ediciones del programa nos dice que buena parte de los participantes consiguen un empleo”, comenta Nuria Estalayo, quien recuerda que, sin ir más lejos, “más de un 75% de los participantes de la última edición del programa están trabajando en residencias o ayuda a domicilio. De hecho, tan solo en Tercera Actividad contamos con un 40% de trabajadoras formadas a través de este ciclo oficial”.