Para los que buscan un plan relajado, desconectar el móvil y pasar las horas sin mirar el reloj, no hay mejor sitio que recorrer los maravillosos paisajes de la provincia de Palencia. Si además esos planes los hacemos con niños, visitar algunos rincones naturales que ofrece este entorno, se convertirá en un auténtico placer para los sentidos de pequeños y mayores.
Desde Palencia Turismo nos ofrecen diversas opciones para que este puente del Pilar vuestra escapada en familia sea inolvidable: actividades multiaventura, senderos mágicos o fauna y arquitectura milenaria.
Para arrancar el viaje recalaremos en Alar del Rey donde, nos retrotraeremos a épocas pasadas, para descubrir la obra de ingeniería hidráulica más importante que se realizó en los siglos XVIII y XIX en nuestro país, el Canal de Castilla.
Aunque la obra del canal quedó inconclusa, es fundamental acercarse a esta localidad para conocer la naturaleza visionaria del proyecto en la época en la que se proyectó. Su cauce fue excavado a pico y pala sobre el terreno y anchura y profundidad van cambiando a lo largo de su recorrido dada la orografía del terreno mediante el uso de exclusas, alguna de ellas aún en funcionamiento.
Ahora, estos caminos de sirga que bordean el canal, y por los que originariamente circulaban los bueyes que tiraban de las barcazas; permiten ahora disfrutar a pie, en bicicleta, caballo o en canoa de uno de los parajes más singulares de la comunidad de Castilla y León. Un verdadero museo al aire libre: dársenas, acueductos, esclusas, arcas y arquetas de riego, postes leguarios, casas de escluseros, molinos y fábricas de harina, puentes, presas y almacenes hacen reflexionar sobre lo que fue, el espíritu de quienes lo hicieron posible y la necesidad de avanzar en su proyección y conservación.
La siguiente parada la situamos en Villaescusa de las Torres, donde iniciaremos nuestra senda dentro del Parque Natural de las Tuerces. En esta pequeña localidad se encuentra el inicio de la ruta roja de este espacio natural, una de las más sencillas y con multitud de paneles informativos. Mediante este camino conseguiremos ascender, sin demasiadas dificultades, a las Tuerces; entorno por el que iremos encontrando formaciones tan peculiares como setas pétreas, arcos naturales o puentes. Este singular paisaje natural, permitirá conocer a los más pequeños de la casa cual es el resultado de la erosión de origen kárstico en la roca caliza.
Continuamos nuestra ruta hacia el norte y llegamos al Centro de Interpretación del Puente Romano y el `Puente de la Perdiz´ de Nestar. Este vestigio romano de arquitectura civil, situado sobre el rio Rubagón nos permitirá conocer a cómo eran las comunicaciones en la época romana, la técnica de construcción de las calzadas y la influencia de esta cultura en la zona norte de Palencia. El centro está al aire libre y su acceso es gratuito.
A pocos kilómetros de ahí, en Cillamayor, podemos encontrar otro auténtico tesoro arquitectónico de la zona, que también cuenta con una historia primitiva y lejana; la Iglesia de Santa María la Real. Este templo románico del S. XII restaurado en 2006, que cuenta ahora con una portada románica y una necrópolis medieval, que estuvieron ocultas durante siglos.
Centro de Interpretación de la Minería
Otra de las citas ineludibles en la zona si hablamos de una escapada con niños es el entorno minero de Barruelo de Santullán. Mediante la visita al Centro de Interpretación de la Minería nos convertiremos en los protagonistas de la historia del carbón, desde su formación hasta su utilización por el hombre, de forma totalmente interactiva.
Para completar esta etapa, no podemos dejar de visitar la mina con recorrido guiado. A escala natural y con utillaje real, se encuentran los aspectos más significativos del arranque y extracción del carbón, transporte interior, utilización de herramientas, maquinaria minera etc. La ambientación de la visita, cuenta con sonidos reales, rampa que consiguen darnos una idea bastante real de cómo se trabajaba en su interior y que, por supuesto, apasionará a los más pequeños.
Para aquellas familias que disfrutan a partes iguales del arte y la naturaleza, la Senda de Ursi ofrece uno de los paseos a pie más curiosos y atractivos que se pueden realizar en la Montaña Palentina. Esta sencilla ruta, de trazado circular y once kilómetros de recorrido, cuenta con una treintena de curiosas esculturas con las que los miembros del Grupo Muriel rinden homenaje al ilustre escultor palentino Ursicino Martínez. Una auténtica exposición en plena naturaleza.
Como broche final a esta escapada, no podéis regresar a casa sin visitar uno de los lugares más mágicos y singulares de la zona; la reserva del Bisonte Europeo. Bison Bonasus se sitúa en un entorno privilegiado de la Montaña Palentina, San Cebrián de Mudá. La reserva, de unas 20 hectáreas repletas de robles y praderas, se puede recorrer por sus sendas a pie, en bicicleta, 4×4 o coche de caballos. Con esta visita conoceremos una especie animal milenaria de la que quedan muy pocos ejemplares en el planeta y nos concienciaremos sobre la necesidad de cuidar el ecosistema que nos rodea.
Más información: Oficina de Turismo C/ Mayor, 31.Teléfono: 979 70 65 23, o en www.palenciaturismo.es