La Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza de Guardo, durante la actual temporada de caza del corzo, “tuvo conocimiento de que cazadores domiciliados en Extremadura, pudieran estar trasladando trofeos de caza mayor desde Palencia a sus localidades de origen, preparados por un vecino de Guardo y amparados por precintos de años anteriores, por lo que se iniciaron las investigaciones oportunas”.
De este modo, el pasado 30 de abril se procedió a la detención de un vehículo en el término municipal de Renedo de la Vega, con un único ocupante, vecino de Cáceres, de 53 años de edad. Posteriormente, “se realizó un registro del interior del vehículo, localizando un cráneo de corzo macho limpio y colocado en una tabla de madera, acompañado de un precinto de corzo, que no amparaba su legal tenencia”.
Tras las gestiones realizadas por la Guardia Civil, se identificó y denunció igualmente a un vecino de Guardo, de 43 años de edad, “al reconocer ser la persona que abatió, limpio y preparó el cráneo del corzo, y no haber comunicado tal abatimiento a la autoridad competente, así como por realizar labores de taxidermia sin estar debidamente registrado para tal actividad”.
Los hechos fueron puestos en conocimiento de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Palencia, por una supuesta vulneración a la normativa sobre caza en Castilla y León. Además, se procedió al decomiso del cráneo y de dos precintos de años anteriores, del Coto Privado de Caza P-10863, sito en el término municipal de Guardo.
La Guardia Civil investiga estos hechos por si fueran constitutivos de infracción penal en materia de protección del medio ambiente o falsedad documental.