La Unión de Consumidores de Palencia ha pedido la urgente reapertura de los centros de salud y consultorios de toda la provincia. “Este 21 de junio, finaliza el estado de alarma, entramos en la llamada nueva normalidad. Se abren todos los bares y lugares de ocio, todos los comercios, se puede viajar a lo ancho y largo del territorio nacional y a la mayor parte de la Unión Europea, pero no se abren los centros de salud y consultorios de la provincia. ¡¡¡Todo un paradigma!!! ¡El mundo al revés!”, denuncia la entidad.
En un comunicado explican que “hasta ahora han tenido que morir miles de personas por causa del coronavirus, ¿cuántos deben morir ahora por las enormes carencias de nuestra Sanidad pública? Hay pendientes miles de consultas de especialistas suspendidas, miles de pruebas diagnósticas que debieron ser desprogramadas, miles de pacientes que necesitan acudir presencialmente a su médico de familia y la movilidad para solucionarlo es casi nula.
Ahora ya no existe el agobio de las primeras semanas por el coronavirus, si bien el personal sanitario está agotado y necesita un merecido descanso para recuperar fuerzas, por si fuese necesario por posibles repuntes del Covid 19, que esperamos no lleguen.
Si la Sanidad pública del Servicio Sanitario de Castilla y León ya tenía enormes goteras y era la que menor número de sanitarios por habitante tenía de toda España, ¿cómo está ahora después de este colosal desgaste?
Los continuos recortes, tantas veces denunciados, nos han llevado a esta lamentable situación de falta de medios y de profesionales de la Sanidad pública.
El SACYL necesita reforzarse de forma urgente, tanto personal como materialmente. No sirven contratos por horas o por días o por semanas, como han denunciado los sindicatos del sector. Es necesario un refuerzo porcentual muy alto, no sólo para cubrir bajas y vacaciones, sino para que sea duradero y un posible rebrote no nos vuelva a encontrar en cueros.
Van a llegar muchos millones de euros para reforzar la Sanidad Pública. Esperamos que sirvan para eso, para reforzarla adecuadamente tanto personal como materialmente, que no sirva para otras cuestiones distintas, como ha ocurrido muchas veces.
Prolongar la situación actual hasta septiembre sólo significaría, una vez que se ha aliviado significativamente la situación, querer disimular las vacaciones del personal sanitario a costa de éstos y de los usuarios.
No es tolerable que estén abiertos los centros de ocio y recreo y cerrados los centros de salud. Es una ignominia intolerable”.